Onicosquisis o exfoliación de las uñas: causas y prevención

A menudo las uñas sufren descamación y se separan en láminas por diferentes causas, por lo que, en estos casos, antes de practicarse la manicura hay una serie de pautas a evitar.

Onicosquisis o exfoliación de las uñas: causas y prevención
Onicosquisis o exfoliación de las uñas: causas y prevención
22 agosto 2016 | 16:00 h
A menudo nuestra manicura se echa a perder y nuestras uñas comienzan a resquebrajarse, “pelarse” y a separarse en finas láminas, lo que además de empeorar su estética hace difícil el esmaltado. Se trata de un proceso denominado onicosquisis, por el que las capas se separan del borde de la uña.

Joshua Zeichner, el director de investigación cosmética y clínica en el departamento de dermatología en el Hospital Monte Sinaí de Nueva York, asegura que “los cambios en las uñas son normales a medida que envejecemos debido a la circulación sanguínea y los efectos de los rayos UV”.

Un exceso de lavado de manos, el uso de acrílicos, abusar de los esmaltes o la tendencia a la sequedad de manos son algunos de los factores que provocan la descamación

No obstante, esta descamación también viene dada por malos hábitos, como resultado de un exceso de lavado de manos, el uso de acrílicos, abusar de esmaltes o una tendencia derivada en la sequedad de manos que también acaba afectando a las uñas.

Eso sí, en algunos casos, las uñas quebradizas podrían ser una señal de baja función tiroidea o anemia. De hecho, las uñas amarillentas a veces también están relacionadas con la enfermedad pulmonar, mientras que un color blanquecino podría ser señal de problemas renales. En estos casos, no hay que dudar en acudir a consulta dermatológica para salir de dudas.

¿QUÉ ES LO QUE NO DEBEMOS HACER?

Si la onicosquisis o exfoliación de las uñas es un problema que padeces con frecuencia, apunta esta serie de pautas a evitar antes de acudir a un centro de estética a que te hagan la manicura:

1. Cortar las cutículas: se puede limpiar con aceites específicos, limar suavemente o incluso, pulir, pero eliminarla perjudica a la salud y al posterior crecimiento de la uña.

2. Esmaltado permanente: aunque esta reciente técnica estética es una maravilla y hace que tus uñas luzcan con un color intacto durante semanas, no hay que caer en el abuso ya que tanto los productos como la lámpara de secado son nocivos para las uñas. Se debería recurrir a esta opción solo en ocasiones especiales y ocasionalmente.

3. No dejar respirar a las uñas: conviene dejarlas de vez en cuando al natural y no esmaltarlas por sistema. De esta forma, la uña respirará y recuperará la hidratación y nutrición perdida recuperando así su estado.

4. Prescindir de la base: puede alargar el proceso de manicura, pero si utilizas una notarás la diferencia.

5. No beber agua suficiente: además de ser un error para el organismo (y más en verano), permanecer bien hidratado también conserva la saluda de la piel, el pelo y las uñas mejorando su apariencia.


Porque tú eres lo más importante… Estetic.es
Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.