A todas nos gusta lucir una melena de escándalo, pero a veces puede resultarnos complicado por distintos factores. Muestra de ello son las puntas abiertas, la sequedad del cabello, las fibras débiles o que se rompen con facilidad, la caída y pérdida de volumen… En definitiva, una falta de vitalidad y firmeza que será síntoma de un pelo o cuero cabelludo dañados. Y los factores que lo provocan pueden ser muy distintos, tales como el maltrato del cabello, la genética, los hábitos de vida como la alimentación o el estrés, la edad o los factores ambientales.
Para remediarlo, buscamos tratamientos que reparen en profundidad, bien buscando en internet o preguntando a nuestro estilista. Y en esa búsqueda, puede que te hayas topado con un protocolo en tendencia: el «bótox» para el cabello. De hecho, varias influencers ya confían en él, como es el caso de Lola Lolita. La alicantina aseguró a sus más de 3,4 millones de seguidores de Instagram que se lo realiza una vez al mes “para reestructurar el pelo cerrar cutículas y darle brillo y flexibilidad”, comentaba en stories la influencers.
¿EN QUÉ CONSISTE EL «BÓTOX» PARA EL CABELLO?
Seguramente ya te hayas preguntado si, al igual que ocurre con los tratamientos de Medicina Estética para el rostro, el «bótox» para el cabello también utilice la toxina botulínica para la reparación capilar. En este caso, no hay agujas de por medio. La técnica simplemente ha adoptado el nombre de «bótox» para relacionarse de alguna manera con los buenos resultados que ya ha demostrado dicha toxina en los tratamientos estéticos o médicos, pues la formulación de los productos capilares con efecto neuromudalor simplemente contienen ingredientes naturales para lograr la hidratación del cabello, tales como vitaminas, aminoácidos, proteínas, ácido hialurónico o colágeno.
No es un tratamiento alisador que ataque a la estructura de la cutícula, sino reparador
El procedimiento es relativamente sencillo, aunque se suele aplicar en peluquerías y centros de belleza, ya que requiere dedicación. Consiste en el lavado del cabello con un champú alcalino que abra la cutícula para higienizarlo profundamente y permitir que los activos posteriores penetren mejor. Posteriormente, se retira el exceso de humedad con una toalla y secador y, con el cabello húmedo, se aplica el producto de raíz a puntas, para dejar actuar durante 90 minutos. Una vez transcurrido el tiempo, el pelo se aclara con agua fría, se seca con secador y, por último, se sella con varias pasadas de plancha.
Los efectos de los tratamientos de «bótox» para el cabello pueden prolongarse de 1 a 2 meses. No es un tratamiento alisador que ataque a la estructura de la cutícula, sino reparador. Supuestamente, sus propiedades permiten una hidratación y nutrición profundas del cabello, reparando el daño de la cutícula devolviéndole el brillo a la melena y haciendo mucho más flexibles a las fibras capilares para eliminar su aspecto quebradizo. Además, el cabello se convierte resistente al encrespamiento.
¿ES REALMENTE EFECTIVO?
Desde Estetic nos hemos preguntado si realmente estos tratamientos capilares son realmente efectivos y, para salir de dudas, hemos contactado con la doctora Paloma Borregón, dermatóloga y directora médica de Clínica Kalosia. La experta nos cuenta que “todavía no hay muchos estudios sobre estos tratamientos para el cabello y no hay nada seguro”. Como dermatóloga, prefiere ser cauta y esperar para sacar más conclusiones. De momento, no los practica ni cree que sean de utilidad.
En cualquier caso, si presentas problemas capilares, desde Estetic te recomendamos acudir a tu dermatólogo para que sea el especialista quien pueda valorar si existe realmente un problema capilar y cuáles son las mejores soluciones o tratamientos para combatirlo. En ocasiones, detrás de un síntoma puede esconderse un problema mayor que sólo un médico puede detectar.