Con el pelo ocurre eso de que “nunca llueve a gusto de todos”. Quien lo tiene liso y lacio, lo prefiere ondulado y con algo más de volumen, mientras que, quien nace con melena rizada, lo quiere liso y más domable. Desde Estetic, ya hemos hablado en varias ocasiones de los tratamientos que ofrecen las clínicas de belleza para transformar el cabello, siempre de una forma saludable para no estropear la cutícula. Pero, ¿cómo cuidarlo desde casa?
Hoy venimos a comentar una posible solución para los cabellos lisos y lacios, que generalmente son menos porosos y, en consecuencia, acumulan más grasa que las melenas rizadas. Muchas de nosotras lo tenemos así y es una auténtica desesperación convivir con él a diario, porque la melena se ensucia demasiado rápido, especialmente la zona de la raíz, que pierde el poco volumen que podía quedarnos.
¿La solución? Podría estar en lavarse la cabeza todos los días, pero esto entraría en conflicto con las recomendaciones de los profesionales, que aconsejan lavarse el cabello en torno a las 2 o 3 veces por semana. Así que te proponemos otra alternativa: el lavado inverso.
¿QUÉ ES EL LAVADO INVERSO?
Como indica su propio nombre, el lavado inverso se basa en invertir el orden de los pasos en el lavado de la cabeza, es decir, empezando por el acondicionador o mascarilla y aplicando por último el champú. Habría que respetar el modo de ejecución habitual, por ejemplo, utilizando el acondicionador en las puntas con el cabello húmedo y después lavando la raíz con la cabeza mojada. Incluso podría volver a aplicarse un segundo lavado con champú, si consideráramos que está demasiado sucia.
La cutícula absorbe los activos nutritivos del acondicionador o mascarilla cuando se les deja actuar durante el tiempo estipulado
El objetivo del lavado inverso es conseguir una melena mucho más limpia, ya que al utilizar el champú en segundo lugar, los restos más grasos de la mascarilla se eliminarán de las zonas del cuero cabelludo en las que haya podido caer. No hay que temer por la efectividad de los productos más nutritivos, como el acondicionador, ya que dejándolos actuar durante el tiempo estipulado por el fabricante, será suficiente para que la cutícula pueda absorber los activos hidratantes.
¿QUÉ MELENAS PUEDEN UTILIZAR EL LAVADO INVERSO?
Esta modalidad de lavado del cabello ayuda a las melenas lisas y lacias, puesto que los productos como las mascarillas, suavizantes y acondicionadores suelen incorporar siliconas en su fórmula, que aportan peso y, por lo tanto, reducen el volumen y hacen que se ensucien con mayor facilidad. Y si te estás preguntando la frecuencia con la que deberías recurrir a estar opción, también tenemos la respuesta: una vez por semana, siguiendo una frecuencia de lavado en torno a las 3 semanales.
Respecto a las melenas onduladas, rizadas o rebeldes, se desaconseja seguir esta técnica, pues hay una tendencia al encrespamiento, que seguro que no estás buscando. Si lo que quieres es controlar el frizz, busca un sérum o aceite capilar que selle las cutículas, hidrate en profundidad y ayude a restaurar su barrera cutánea, aplicándolo de medios a puntas, pero nunca desde la raíz para no ensuciarlo.