Aunque deberíamos usar protección solar durante todos los meses del año, es en verano cuando más porcentaje de la población utiliza las cremas solares para protegerse de los daños del sol en la playa o en la piscina. Sin embargo, hay unas pieles que tienen mayor fotosensibilidad a otras y, por lo tanto son más susceptibles a sufrir quemaduras o eritemas solares.
Por este motivo, a la hora de seleccionar una crema de protección solar, debemos prestar atención al factor que presente, es decir, a su valor SPF. Contra más alto sea, asegurará una mayor protección a la resistencia natural de la piel antes las quemaduras del sol. Es aquí donde entra la relevancia de los fototipos de piel, que es la capacidad de adaptación de la dermis a la radiación solar.
¿CUÁL ES TU FOTOTIPO DE PIEL?
Para conocer el fototipo de nuestra piel, debemos atender al color de la misma y a otras condiciones, como el color del cabello, de los ojos, el tipo de bronceado que consiguen los melanocitos y la frecuencia o intensidad de las quemaduras solares. Existen siete y son los siguientes:
- Fototipo 0: es el propio de las personas albinas, encapaces de sintetizar la melanina por una alteración de su material genético. Su pelo es blanco o amarillo muy claro, con ojos también claros y piel muy blanca. Las personas con este fototipo no consiguen broncearse y son extremadamente sensibles a las quemaduras solares.
- Fototipo I: su piel es también muy blanca y suele corresponder a gente con el cabello rubio o pelirrojo. Se queman con facilidad y es muy difícil que adquieran bronceado con la exposición solar.
- Fototipo II: la piel es blanca y sensible al sol, en personas de cabello normalmente rubio. Pueden conseguir broncearse ligeramente, aunque siguen siendo susceptibles de sufrir quemaduras.
En función de nuestro fototipo o tono de piel debemos utilizar cremas solares con un factor de fotoprotección solar mínimo
- Fototipo III: es el característico de las personas con pelo castaño y piel clara, típico de los europeos. El bronceado de estas pieles suele adquirir tonos dorados y en ocasiones se queman durante las primeras exposiciones al sol.
- Fototipo IV: corresponde a pieles morenas con cabello castaño, que se queman raramente y logran un bronceado rápido.
- Fototipo V: se da en pieles oscuras de cabello moreno y también se queman en pocas ocasiones. Su tipo de bronceado es muy intenso después de tomar el sol.
- Fototipo VI: es el de las personas de piel y cabello negro, que no se queman y al mismo tiempo logran broncearse de manera intensa.
¿QUÉ PROTECCIÓN SOLAR UTILIZAR SEGÚN TU FOTOTIPO?
En función de nuestro fototipo o tono de piel, deberíamos utilizar cremas solares con un factor de fotoprotección solar mínimo, pues siempre hay que prevenir la aparición de problemas, como puede ser el cáncer de piel:
- En los fototipos 0, I y II: ya que son extremadamente sensibles al sol, deberían evitar la exposición solar en las horas de mayor intensidad y utilizar siempre cremas solares con SPF 50+.
- En los fototipos III y IV: estas pieles necesitan un SPF 50 o 40.
- En los fototipos V y VI: es recomendable que se apliquenun SPF 30.