Lograr la regeneración de la piel es una de nuestras máximas preocupaciones para evitar que aparezca el envejecimiento prematuro. Aunque existen decenas de tratamientos para combatir las arrugas, prevenir su aparición es el paso fundamental para que el aspecto de nuestro rostro no se vea afectado. Adicionalmente, con el paso del tiempo nuestro pelo también va perdiendo fuerza y volumen, así que hay que dejar la pereza a un lado y cuidarse de arriba abajo para sacarnos el máximo partido.
Desde Estetic.es ya hemos hablado de decenas de tratamientos para aliviar las líneas de expresión y de otros tantos para fortalecer el cabello, pero no de ninguna técnica empleada para contribuir a la regeneración cutánea y capilar. Y es que los avances científicos nos han dejado un tratamiento muy efectivo, actualmente en tendencia entre los centros de estética. Se trata de los exosomas, sustancias que produce nuestro propio cuerpo y con aplicaciones en el mundo de la belleza.
¿QUÉ SON LOS EXOSOMAS?
Los exosomas son una especie de bolsas extracelulares descubiertas hace relativamente poco y que podemos encontrar en las células de los tejidos corporales y en fluidos como la sangre, la orina o el líquido cefalorraquídeo. Tienen un alto contenido en proteína y lípidos y son producidos principalmente por las células madre, de ahí sus numerosas aplicaciones.
Se han empleado como terapia para enfermedades neurodegenerativas por su capacidad para separar de la sangre del fluido extracerebral gracias a su barrera impermeable. Pero además, estas partículas facilitan la comunicación entre las células, ya que transportan en su interior material genético y proteínas. También transportan muy bien los medicamentos, enseñando a otras células del cuerpo cómo deben funcionar.
Los exosomas no combaten la alopecia, pero sí fortalecen y regeneran el cuero cabelludo
En los tratamientos estéticos, los exosomas se utilizan para regenerar los tejidos que se ven afectados por el envejecimiento celular, alisando arrugas y suavizando las facciones. Pero también están indicados para acelerar el proceso de curación de cicatrices y enfermedades cutáneas, ya que nutren la piel y mejoran su tono natural, brillo e hidratación porque activan la producción de colágeno y elastina. Así que son ideales para tratar el cutis, cuello, escote y manos.
Respecto al cabello, estas partículas estimulan la producción de fibras capilares, promoviendo también su regeneración. Aunque no combate la alopecia en las zonas en las que ya no crece el pelo, sí que favorece el fortalecimiento del cuero cabelludo y mejora la densidad de los folículos pilosos existentes. De esta manea, el pelo crece más fuerte y resistente y se ve mucho más brillante.
TRATAMIENTOS CON EXOSOMAS
Para poder aprovechar todos los beneficios de los exosomas en cara o cabello, existen varias técnicas que abren la piel y aseguran la penetración de estas partículas. En algunas circunstancias, se puede requerir anestesia local, pero otros tratamientos son indoloros como con la aplicación de dermapen (microagujas) o radiofrecuencias fraccionadas mediante un aplicador de ondas electromagnéticas. En las clínicas estéticas, pueden complementarlo con otros productos cosméticos para garantizar una reparación completa de la piel.