El acné es un trastorno de la piel que afecta a más de 50 millones de personas en todo el mundo. Ocurre cuando los folículos pilosos se tapan con grasa y células cutáneas muertas. Aunque se trata de un problema que es más frecuente durante la adolescencia debido a los cambios hormonales, lo cierto es que puede afectar a cualquier persona y en cualquier edad.
Se pueden clasificar diferentes tipos de acné:
Acné vulgar. Más común durante la adolescencia. Se caracteriza por la aparición de comedones, pápulas y quistes en la zona del cuello, la cara o los hombros. Su causa principal se debe a los cambios hormonales que chicos y chicas atraviesan durante esa etapa.
Acné cosmético. Como su propio nombre indica es una especie de acné que aparece por el uso inadecuado de productos cosméticos como las bases de maquillaje, los polvos o incluso las cremas hidratantes.
Acné neonatal. Es el acné más frecuente en los recién nacidos. Suelen aparecer a las 48-72 horas después del nacimiento. Su aparición suele estar relacionada con la progesterona materna.
Acné tropical. Es una variedad especialmente intensa de acné que se da en las regiones tropicales con clima cálido y húmedo.
El acné es un trastorno cutáneo que puede afectar a cualquier persona y en cualquier edad
Acné rosácea. Es una de las formas de acné más comunes. Provoca el enrojecimiento y sarpullido en la cara. Sus causas pueden estar relacionadas con un sistema autoinmune más activo de lo normal, antecedentes familiares o las condiciones medioambientales.
Acné iatrogénico. Esta originado por el consumo de determinados medicamentos.
Acné tardío. Aparece durante la etapa premenstrual o cuando la mujer ya es más adulta. Puede darse en cualquier parte del cuerpo y se debe a las modificaciones hormonales de esa etapa.