Según la Clínica de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora IM CLINIC, el pecho es la parte de la anatomía femenina que más preocupa a las mujeres; prueba de ello es que las cirugías estéticas destinadas a mejorarlo son las más solicitadas.
Si bien es cierto que el aumento de pecho sigue siendo la cirugía reina en mujeres (19,9% de las cirugías estéticas realizadas en IM CLINIC en 2017), todos los procedimientos que permiten embellecer el pecho son, con creces, los más demandados suponiendo un 40.2% de las cirugías estéticas solicitadas por estas. De hecho, no todos los aumentos de mamas se hacen para conseguir un mayor volumen, muchas mujeres acuden a este procedimiento para devolver a su pecho la turgencia y proyección perdidos como consecuencia de los embarazos, pérdidas de peso u otras circunstancias.
Asimismo, las otras cirugías que permiten mejorar el pecho femenino y que son muy solicitadas son mastopexia, con o sin prótesis, que permite recuperar el pecho caído y supone un 13,8%; y las reducciones (que también pueden ser con o sin prótesis) con un 6,5%.
El pecho es la parte de la anatomía femenina que más preocupa a las mujeres; prueba de ello es que las cirugías estéticas destinadas a mejorarlo son las más solicitadas
Entre las cirugías corporales, la lipoescultura (solicitada tanto por mujeres como por hombres) supone un 19,2%; mientras que en cirugía facial, la rinoplastia con un 6,2% y la blefaroplastia con un 5,4% son las más demandadas.
En este sentido, dentro del aumento de mamas, la vía axilar es sin duda la más deseada entre las mujeres. Esta técnica permite introducir la prótesis a través de una pequeña incisión en la axila, donde la cicatriz queda escondida y no es necesario que el bisturí llegue a tocar el pecho. Entre los beneficios principales cabe destacar que esta vía de abordaje permite no tocar ninguna de las terminaciones nerviosas de la mama, la areola o el pezón, lo que minimiza una posible pérdida de la sensibilidad en la zona. Además, el tejido glandular no se ve afectado en absoluto, por lo que no interferirá en la futura lactancia materna ni en los controles médicos de la mama.
En este caso, el doctor Ivan Mañero fue uno de los precursores de esta técnica en España. Hace casi 20 años que la aconseja, siempre que sea posible hacerla, ya que la cirugía no requiere intervenir en la mama, el resultado es más natural y las cicatrices quedan escondidas en la axila. ''A partir de mi experiencia, creo que la vía axilar es sin duda alguna la mejor opción en aquellas pacientes que se puede realizar por su anatomía y forma del pecho. No es un tipo de técnica sencilla para el cirujano, requiere experiencia y es más laboriosa, pero es mucho más segura para la paciente porque no es necesario intervenir en el tejido de mamario y eso ofrece muchas otras ventajas'', concluye el doctor.