El tratamiento estético más demandado tanto por mujeres como por hombres es aquel que busca la pérdida de grasa localizada. Pasar por quirófano era inevitable para someterse a una reducción de este tipo. Un hecho que suponía no solo una intervención larga y complicada, sino un periodo de recuperación muy molesto.
Sin embargo, el panorama actual ha cambiado. Los métodos no invasivos se han convertido en un gran aliado para aquellos que están interesados en la remodelación de su cuerpo. La trigésimo cuarta edición del Congreso Nacional de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME),trajo consigo la presentación de una de las técnicas más novedosas en esta materia: el lipoláser, tratamiento que ha desbancado liposucción tradicional como el método más demandado para acabar con la grasa.
El lipoláser se ha convertido en la alternativa no invasiva a la liposucción
Con equipos láseres de última generación, esta técnica permite la remodelación corporal de acúmulos grasos de forma permanente, acompañada de flacidez moderada. Realizada con anestesia local, su recuperación es rápida y cómoda. Además, reduce la posibilidad de cicatrices y sus resultados son altamente satisfactorios.
HIFU DE ALTA INTENSIDAD Y LÁSER NO INVASIVO
Aplicando las tecnologías e investigaciones más vanguardistas al cuidado corporal, encontramos otros dos tratamientos que, de manera no invasiva y en pocas sesiones, permiten recuperar la figura y eliminar, sin esfuerzo, el exceso de grasa tan molesto: el HIFU de alta intensidad y el láser no invasivo.
Por un lado,los nuevos equipos que aplican la tecnología HIFU basada en ultrasonidos focalizados de alta intensidad, gracias a la cual consigue eliminar los cúmulos de grasa hasta en las zonas más complicadas del cuerpo, como abdomen, cadera y cartucheras, convirtiéndose en el aliado postvacacional perfecto.
Los láseres no invasivos son, por otro lado, otra de las opciones para dejar atrás los complejos. Ya está en España el equipo de láser diodo aprobado por la FDA para tratamientos de lipólisis no invasiva, que permite eliminar la grasa localizada y persistente en flancos, cartucheras, abdomen, espalda, cara interna y externas de los muslos, brazos y papadas.