Tener una sonrisa perfecta es probablemente el deseo de cualquier persona, por ese motivo las carillas dentales son una de los tratamientos más solicitados.
Son una solución rápida para lucir la sonrisa de tus sueños, ya que son capaces de cambiar el tamaño, color, forma y cubrir cualquier mancha o imperfección.
"Habitualmente se usan para resolver alteraciones tales como diastemas, manchas dentales, roturas y fisuras en las piezas, color amarillo u oscurecimiento dental, desgastes del esmalte o irregularidades en el tamaño del diente", indica la Doctora Patricia Palma Maldonado, fundadora de P&P Clinic.
Existen varios tipo de carillas, las de porcelana que son más resistentes y, por otro lado, las de composite que son menos duraderas pero el resultado estético es igual
Es importante saber las necesidades de cada paciente para proporcionar un tratamiento personalizado, "comenzamos tomando fotos extra e intraorales para medir las proporciones y forma de la dentadura. Además, se utiliza el escáner intraoral 3D para tomar registros de los dientes desde diferentes ángulos y así determinar cómo va a ser el resultado con las carillas dentales" explica la doctora.
Existen varios tipo de carillas, las de porcelana que son más resistentes y, por otro lado, las de composite que son menos duraderas pero el resultado estético es igual.
Dentro de las carillas de porcelana diferenciamos entre disilicato de litio y feldespáticas, dependiendo de los materiales. "Las feldespáticas son mucho más finas, con un espesor que se sitúa entre los 0,2 y 0,5 mm. Tienen una menor resistencia mecánica porque su fase cristalina se sitúa en el 20%, siendo el resto de la porcelana matriz vítrea. En el caso de las hechas de disilicato de litio, son más resistentes, ya que aumenta su proporción de cristales y están indicadas para casos de máxima resistencia”, acalara Patricia.
En en caso de las carillas de composite añade que, "son un tipo de carillas que presenta múltiples ventajas. Su colocación es más rápida y sencilla que con otros materiales, se necesitará solo una sesión para ser colocadas ya que el diseño se hace en la clínica. Por otro lado, aunque son materiales extremadamente resistentes, su duración es menor que las de porcelana".
Si lo que buscas es un resultado estético, esta es una de las mayores ventajas de las carillas, además de ser resistentes, ya que duran entre 15 y 20 años.