La terapia con acupuntura es ya bien conocida en la sociedad occidental. A menudo se recurre a ella para el tratamiento del dolor y para mejorar el bienestar del organismo, pero en los últimos años se está desgranando un beneficio que cada vez va cobrando más fuerza: acupuntura como terapia adelgazante. ¿Qué hay de verdad en ello? Te lo contamos.
¿QUÉ ES LA ACUPUNTURA?
La acupuntura es una técnica milenaria oriental, nacida en China, que consiste en la estimulación de puntos y meridianos energéticos ubicados en zonas estratégicas del cuerpo para restaurar la salud. Estos puntos meridianos guardan relación con órganos, sistemas y vísceras específicos del organismo, de tal manera que, actuando sobre ellos, es posible restaurar el equilibrio de los flujos de energía y devolver el bienestar al individuo.
Este método utiliza la inserción de agujas finas en los puntos estratégicos para activar o estimular los meridianos y recuperar así el equilibrio de las energías internas. Y, aunque la técnica nació hace siglos, lo cierto es que la Organización Mundial de la Salud (OMS) respalda sus beneficios como medicina alternativa. Esto convierte a la acupuntura como un método terapéutico eficaz en diversas afecciones, incluida en la pérdida de peso. Y todo ello sin demostrar efectos secundarios adversos, más allá de posibles hematomas o sangrado leve en los puntos de inserción.
ACUPUNTURA PARA BAJAR DE PESO
En los últimos años, la acupuntura ha alcanzado popularidad como método efectivo para la pérdida de peso de una manera saludable, especialmente como alternativa a las conocidas como ‘dietas milagro’. Esta terapia se sustenta en la idea de que nuestro cuerpo está lleno de energía, conocida como qi (pronunciado "chi"). Según la medicina china, cuando este flujo de energía se bloquea, puede conducir a una serie de problemas de salud, incluyendo el aumento de peso.
A través de la inserción de agujas en puntos específicos del cuerpo, en este caso en los meridianos relacionados con el apetito, el acupunturista puede desbloquear este flujo de energía, ayudando a estimular el metabolismo y a aumentar la capacidad de quemar grasa, entre otros. Esto se consigue porque las agujas activan el sistema nervioso central, contribuyendo así a la regulación neurohormonal y neuroinmune. Esa activación influye directamente en las áreas cerebrales reguladoras del apetito y de la adicción de la comida, en el metabolismo con la liberación de la glucosa y sobre los agentes inflamatorios.
Más de 2.500 millones de personas en todo el mundo padecen sobrepeso, según la OMS
La acupuntura trabaja la ansiedad, la sensación que marca el apetito, a través de la regulación hormonal. Aunque no exista necesidad fisiológica de ingerir alimentos o de sentir hambre, el estrés incita a comer por las hormonas que libera el organismo. Así pues, la restauración de los torrentes de energía en el interior del organismo ayudan a disminuir la ansiedad y a favorecer el autocontrol con la comida.
Esta terapia milenaria cuenta con el respaldo de diversos estudios científicos que han demostrado un impacto positivo en la ingesta y la salud metabólica. Gracias a la reducción del estrés, la acupuntura puede ayudar a reducir el apetito y, por consiguiente, a un menor consumo de alimentos y a una mayor pérdida de peso. Se trata, sin duda, de unos beneficios de especial relevancia, teniendo en cuenta que 2.500 millones de adultos padecen sobrepeso según la OMS, de los cuales 890 millones sufren obesidad.
TIPOS DE ACUPUNTURA ADELGAZANTE
Existen diferentes métodos de acupuntura que pueden utilizarse para la pérdida de peso, como la acupuntura personalizada y la acupuntura con ventosas:
- La acupuntura personalizada es un plan de tratamiento diseñado específicamente para las necesidades individuales de una persona, teniendo en cuenta factores como su estado de salud actual, su historia médica y sus objetivos de pérdida de peso. El objetivo principal es reducir el estrés como factor influyente en la activación del apetito.
- La acupuntura con ventosas utiliza ventosas de vidrio que se colocan sobre la piel para crear succión. Con ellas, se puede ayudar a estimular el flujo de sangre y energía en el cuerpo. De esta manera, se pretende mejorar la circulación de la sangre y promover la desintoxicación. Esta opción también es personalizable a las necesidades del individuo.
Las personas que deseen recurrir a la acupuntura adelgazante podrán hacerlo entre una y tres veces por semana, aunque el acupunturista pautará el tiempo recomendado de manera individualizada. Sus efectos se extienden de 2 a 4 días tras la sesión. Generalmente, suelen necesitarse entre 10 y 20 sesiones para maximizar todos los beneficios, aunque para notarlos es imprescindible conjugar la terapia con un enfoque integral de vida saludable. Esto quiere decir que, además de seguir una alimentación variada y equilibrada, es necesario hacer ejercicio físico regular.