Uno de los platos más apetecibles del verano son las ensaladas, porque son frescas, ligeras, contienen mucha agua, son sanas y saciantes.
Sin embargo, no todas son iguales, ya que las hay perfectas para mantener a raya los kilos de más, para reducir la presión arterial, para mejorar la retención de líquidos… y hasta una perfecta para prevenir y corregir los efectos de los rayos del sol sobre nuestra piel.
Pero, ¿cuáles son los ingredientes que debe llevar una ensalada para que nos proteja de los rayos solares y potencie nuestro bronceado? Según Bendita Locura Coffee & Dreams: quinoa, espinacas, pollo ahumado, naranja, tomate en aceite de oliva virgen extra, brotes de alfalfa, yakiniku, mile y semillas.
Y es que, la quinoa, por ejemplo, contiene lisina, un aminoácido esencial imprescindible en la producción de elastina y colágeno, que son las proteínas que le confieren a la piel su firmeza y flexibilidad. Además, la quinoa mejora la concentración de la melanina para reducir la hiperpigmentación solar.
Uno de los platos más apetecibles del verano son las ensaladas, porque son frescas, ligeras, contienen mucha agua, son sanas y saciantes
Las espinacas, por su parte, son ricas en vitamina B, que protege la piel de los rayos ultravioleta y del envejecimiento prematuro de la piel. Además, como casi todas las verduras de hoja verde, contiene carotenos antioxidantes que ayudan a broncearnos más rápido y de manera más uniforme.
Por otro lado, el pollo posee muchas vitaminas del grupo B, especialmente B3, una vitamina que se ha demostrado muy eficaz en la prevención del cáncer de piel, provocado por una elevada exposición solar.
Asimismo, las frutas y hortalizas de color naranja, rojo o amarillo como la naranja son ricas en betacaroteno, un nutriente que se transforma en vitamina A y se almacena en forma de retinol, una sustancia que impide la degradación del colágeno bajo los rayos solares.
También, el tomate contiene licopeno, un compuesto que se ha demostrado que aumenta la capacidad de la piel de protegerse a si misma de los daños causados por el sol.
En cuanto al aceite de oliva virgen extra, posee gran cantidad de ácidos grasos monoinsaturados esenciales para evitar el temido fotoenvejecimiento.