Sabemos que la buena alimentación es esencial para la salud, pero ¿sabemos cómo el cuerpo obtiene los nutrientes que necesita? ¿O cuáles de ellos son fundamentales para su correcto funcionamiento? La Organización Mundial de la Salud (OMS), identifica como esenciales los nutrientes que contribuyen a la reproducción, buena salud y crecimiento de una persona. Por ello, los divide en dos categorías: micronutrientes y macronutrientes.
Vitaminas. Las vitaminas son micronutrientes que ofrecen una variedad de beneficios para la salud, entre los que se incluyen: reforzar el sistema inmunológico, ayuda a prevenir o retrasar ciertos tipos de cáncer como el de próstata. Ayuda a fortalecer huesos y dientes. Mantiene la piel sana. Ayuda al cuerpo a metabolizar proteínas y carbohidratos. Contribuye al funcionamiento del cerebro y el sistema nervioso. Las vitaminas se dividen en dos subgrupos: liposolubles (A, D, E Y K) y hidrosolubles (B-1, B12,B6,B2,B-5, B-3, B-9, B-7 Y C)
Minerales. Los minerales son el segundo tipo de micronutrientes. Hay dos grupos de minerales: minerales principales y oligoelementos. El cuerpo necesita un equilibrio de minerales de ambos grupos para una salud óptima. Los principales minerales son: sodio, calcio, magnesio, fósforo, azufre, potasio, cloruro.
Proteína. Es un macronutriente que cada célula del cuerpo necesita para funcionar correctamente. Algunos alimentos ricos en proteínas son: carnes rojas, aves de corral, pescados y otros mariscos, legumbres, huevos, productos lácteos, soja, nueces y algunos cereales.
Grasas. Las grasas proporcionan energía al cuerpo y lo ayudan a llevar a cabo una serie de funciones. Sin embargo, es fundamental consumir grasas saludables, como las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, y limitar o evitar las grasas saturadas y trans. Las grasas saludables se pueden encontrar en: nueces, pescados, aceites vegetales o semillas.
Carbohidratos. Son esenciales para el cuerpo. Existen dos tipos de carbohidratos: simples y complejos. Las personas deben limitar su consumo de carbohidratos simples, como pan blanco, pasta y arroz. Y tomar más carbohidratos complejos que se pueden encontrar en alimentos como el arroz integral, verduras, pasta integral, avena, frutas o cebada.
Agua. Es probablemente el nutriente esencial más importante que necesita una persona. Una persona solo puede sobrevivir unos pocos días sin consumir agua. Incluso una deshidratación leve puede causar dolores de cabeza y deterioro del funcionamiento físico y mental.