Una de las grandes preocupaciones cuando llenamos el carrito de la compra son las calorías que llevan los alimentos que vamos a comprar; desde los cereales 0% azúcares, hasta el tipo de pan o leche que protagonizará nuestro desayuno. ¡Calma! Tenemos la solución para ti y todo empieza por dejar de contar calorías y empezar a leer las etiquetas porque, lo verdaderamente importante para no engordar y llevar una dieta saludable, es el contenido nutricional de los alimentos.
Gemma Miranda, Responsable de la Unidad de Nutrición y Dietética de Clínica Opción Médica, nos desvela la solución para que te conviertas en todo un experto sobre información nutricional.
El punto más importante antes de leer las etiquetas de los alimentos es que si no hay etiqueta nutricional, mejor que mejor. Los productos más saludables son los que no están tan manipulados por la industria alimentaria y esos, no contienen una etiqueta nutricional ni una lista de ingredientes, dado que el único ingrediente que contienen es el propio alimento que estamos consumiendo, por ello, tu carrito de la compra debe estar lleno de frutas y verduras.
''Cuanta mayor manipulación haya de un alimento, más ingredientes tendrá. Por ejemplo, un plátano tendrá información sobre su lugar de procedencia o el peso, pero no tendrá una lista de ingredientes, químicamente hablando, porque no está manipulado. Ahora bien, si este plátano está dentro de un batido de leche o un bizcocho, donde ya hay una manipulación, ahí sí que habrá una etiqueta, dado que la legislación obliga a incluirlo. Por lo tanto, cuánto más saludable sea lo que estemos consumiendo, menos ingredientes añadidos tendrá'' aclara la especialista en Nutrición.
El punto más importante antes de leer las etiquetas de los alimentos es que si no hay etiqueta nutricional, mejor que mejor
Por otro lado, los productos 100% naturales y sin lista de ingredientes son óptimos en nuestra dieta, pero algunos de ellos, como los lácteos o los cereales, son igual de importantes y sí cuentan con una tabla nutricional, ya que han sido manipulados por la industria alimentaria. Pero ¿cuáles son los más aconsejables para mantener nuestra línea?
''En primer lugar debemos tener claro que en la etiqueta nutricional hay mucha información, como el fabricante, de dónde procede el producto, cantidad, número de calorías, etc. Ahora bien, lo que más nos interesa saber es el valor nutricional de ese producto y eso lo valoraremos fijándonos en los ingredientes, no en el número de calorías'' comenta Gemma.
Por ejemplo, si todavía no sabes qué tipo de pan, leche o cereales es el mejor para tu dieta, lo primero que debes mirar es el listado de ingredientes y no las calorías que contiene. En este listado, el primer ingrediente es el más importante, ya que es el que está más presente en el alimento que vas a consumir.
''En el índice de ingredientes, el primero que encuentres es el que estará en mayor cantidad. Por ejemplo, si quieres comprar un paquete de pollo rebozado y no sabes cuál elegir porque hay varias marcas, lo primero que tienes que mirar en la lista de ingredientes es el primer ingrediente de todos. Si en uno el primero es pollo y en el otro el primer ingrediente es pan, sabremos que uno tiene más rebozado y el otro tiene más cantidad de pollo''.
En la misma línea irían otros productos, como el jamón, por ejemplo. Si no sabemos qué tipo de jamón elegir, hemos de fijarnos en la lista de ingredientes y ver qué ingrediente es el primero, ya que a veces puede contener harina y poco jamón” concluye la nutricionista.