Los especialistas en nutrición y dietética de la Clínica Opción Médica, nos traen la comida más trendy y saludable para este otoño. Y es que, al igual que la tecnología y la ropa, la comida sana también tiene su propia tendencia. 

Para empezar el día, lo mejor es comenzar con un buen plato de tortitas caseras en el desayuno. La base de esta delicia es la avena, un ingrediente rico en vitaminas y minerales, como el magnesio, zinc, calcio y hierro. Siempre puedes prepararlo junto a un surtido de frutas, como los desayunos de avena, plátano y frutos rojos que comparte la infuencer de comida sana, K de Kiwi, en las redes sociales.

Sobre todo no olvides que este plato, además de ser muy saludable, resulta ser súper saciante, por lo que no tendrás hambre hasta la hora de la comida.

Podemos continuar el día con un almuerzo a base de verduras, para disfrutar de las comidas sin sentir remordimiento, con una de las mejores opciones que es sin duda la crema de verduras. Durante esta época del año, los ingredientes que nunca pasan realmente de moda son la zanahoria y el calabacín. Además, con la llegada del frío, lo mejor es disfrutar de este plato con un toque caliente y cremoso.

Este otoño, se llevan unos alimentos bajos en calorías pero capaces que calentarnos el cuerpo ante el frío

Algunas de las ideas más innovadoras son el uso de la leche de coco o las cremas realizadas únicamente a base de espárragos trigueros y guisantes. Ahora bien, si algo ha marcado esta tendencia, es el uso del boniato en las cremas.

Por último, otro de los indispensables durante el otoño es el sándwich vegetal, ya que puede salvarnos de ingerir calorías vacías cuando el tiempo se nos echa encima. Los ingredientes imprescindibles son sin duda el hummus y el aguacate, alimentos que contienen altas dosis de minerales como el hierro, fósforo, potasio y calcio, además de resultar súper saciantes.

Estos alimentos son buenos aliados contra la ansiedad y el frío, y es que en efecto, se ha demostrado que cuando las temperaturas bajan, sentimos la necesidad de ingerir mayor cantidad de alimentos.

En definitiva, la clave es darle al cuerpo lo que necesita y elegir alimentos bajos en calorías que puedan saciar tanto o incluso más que los altamente calóricos, según indica Marta Vallejo, una de las especialistas de la Clínica Opción Médica.