Limitar la exposición, aplicar protector solar y usar ropa protectora han sido durante mucho tiempo las recomendaciones para protegerse de la radiación ultravioleta invisible pero dañina del sol durante el verano y el resto del año. Ahora, la investigación sugiere que puede haber otra forma de ayudar a proteger la piel: cuidar la alimentación.
Estos son algunos de los alimentos que pueden ayudar a proteger la piel de la radiación solar.
Licopeno. Los estudios sugieren que el licopeno puede tener beneficios fotoprotectores, lo que significa que ofrece protección para la piel contra la luz ultravioleta. El licopeno, un pigmento que se encuentra en las frutas y verduras de color rojo, amarillo y naranja, se puede obtener a través de los tomates, la sandía, la guayaba rosa, las naranjas rojas, la toronja rosa, los escaramujos, las zanahorias, los pimientos y la papaya.
Astaxantina. Pigmento rojo responsable del color de muchos animales marinos, como el salmón, la langosta y los camarones, además de algunas bacterias y algas. Los estudios demostraron que la astaxantina minimiza los efectos del envejecimiento, como las arrugas y las manchas solares.
Betacaroteno. El pigmento betacaroteno se encuentra en frutas y verduras de color amarillo y naranja, incluidas las zanahorias, las batatas y las calabazas de invierno, y en las verduras de hojas verdes como la espinaca y la lechuga. El betacaroteno puede proporcionar algo de protección solar en una dosis mínima de 12 miligramos por día cuando se toma durante al menos siete semanas.
Luteína y zeaxantina. Pigmentos anaranjados y amarillos se encuentran en alimentos como el melón, el maíz, las zanahorias, los pimientos y los huevos.
Vitaminas C y E. La mayoría de los estadounidenses obtienen vitamina C de los cítricos, los tomates y el jugo de tomate, pero otras fuentes incluyen pimientos rojos y verdes, kiwi, brócoli, coles de Bruselas y fresas. Las fuentes de vitamina E incluyen aceites vegetales, nueces y semillas, espinacas, brócoli y kiwi. La vitamina C tópica puede ayudar a limitar el daño de la piel por la exposición a los rayos UV.
Polifenoles. Los polifenoles son poderosos antioxidantes que se encuentran en plantas, como frutas y verduras, cereales integrales y flores. Los participantes que bebieron el té podrían estar expuestos a la luz ultravioleta por más tiempo antes de experimentar enrojecimiento de la piel.