Todos podemos llevar un estilo de vida saludable, siguiendo una dieta variada y sana, tanto si practicamos yoga como si no lo hacemos. Pero si profundizamos, uno de los ideales del yoga, ya desde hace miles de años, es que los seres vivos son un todo. A nivel ético y espiritual, se promulga el principio de la ''no violencia'' (ahimsa), el cual promueve el respeto a la vida de todos los seres, lo que implica alimentarse sin hacerles daño. Algo poco interiorizado en la dinámica alimenticia actual.
Lucía Liencres, fundadora del primer estudio de yoga online en español THECLASSyoga.com, afirma que ''la práctica de yoga está directamente relacionada con la alimentación, pero no solo con un tipo de nutrición vegetariana o vegana, sino con un estilo de vida íntegro que te permite estar en equilibrio contigo mismo y con tu entorno, a nivel físico, mental y espiritual''.
Concretamente, el estilo de yoga que más tiene presente este tipo de principios en su práctica es el jivamukti yoga, el cual imparten en THECLASSyoga a través de diferentes programas que ayudan a desintoxicar el cuerpo y la mente. Este mismo principio de no violencia también se aplica a uno mismo; es decir, no hacerte daño a ti mismo. Esto se consigue eliminando las toxinas del cuerpo y depurándote.
Las personas que siguen una dieta yóguica integran una alimentación vegetariana en sus vidas a base de alimentos naturales
Somos lo que comemos. Y por eso, siguiendo estos principios, las personas que siguen una dieta yóguica integran una alimentación vegetariana en sus vidas a base de alimentos naturales, lo menos procesados y precocinados posible, los cuales limpian y nutren el cuerpo sin generar residuos. Principalmente, comen verduras y frutas, así como de determinados lácteos (leche, queso y yogur descremados); aunque, dependiendo de cada persona, el consumo de estos últimos podía variar o incluso ser nulo.
BENEFICIOS DE TENER UNA ALIMENTACIÓN VIVA
Aplicando estos consejos y con la práctica de yoga o de meditación, Lucía Liencres asegura que ''sin duda conseguiremos desconectar y relajarnos durante unos días'', además de obtener muchos otros beneficios:
1. Ayudan a eliminar toxinas y a depurar el cuerpo.
2. Los alimentos que tomo no tienen de compuestos químicos (conservantes, aromatizantes...) que acidifican la sangre y la contaminan.
3. Este tipo de alimentación favorece el proceso de alcalinización de la sangre, lo que previene enfermedades como el cáncer.
4. Mejora el sistema inmune.
5. Asimilas mejor los nutrientes.
6. Ahorras en energía, ya que no haces procesos tan elaborados en casa.
7. Tienes la sensación de tener más energía.
8. También te ayuda a perder peso (por el alto nivel en fibra de los alimentos).
¿QUÉ ALIMENTOS INCLUYE LA DIETA VEGETARIANA?
Una dieta vegetariana excluye todas las proteínas de origen animal: carne (cordero, cerdo...), pescado, marisco y aves de corral. Lucía Liencres destaca que ''se basa principalmente en el consumo de frutas, verduras, legumbres, semillas o granos integrales y frutos secos''. El consumo de huevos o leche (ovovegetariana o lactovegetariana) es opcional.
Puedes cubrir la falta de proteína consumiendo otras proteínas o hidratos de carbono que no son de origen animal, como legumbres, tubérculos o cereales
Puedes adaptar también esta comida vegetariana para niños añadiendo más cantidad de frutas o más lácteos. Y, si no quieres ser tan radical, hay otras dietas vegetarianas por las que puedes optar: vegana (alimentación exclusiva de vegetales, sin consumir proteínas animales, huevos, leche o miel); lactovegetariana (incluye algunos lácteos); lactoovovegetariana (incluye el consumo de huevos); semivegetariana (se permite el consumo de determinadas proteínas animales, pero excluye las carnes rojas); y pescetariana (se permite el consumo de pescado y marisco).
¿CÓMO SUSTITUIR LA PROTEÍNA EN UNA DIETA VEGETARIANA?
Puedes cubrir esta falta de proteína consumiendo otras proteínas o hidratos de carbono que no son de origen animal, como legumbres, tubérculos o cereales. ''Más que el tipo de proteína, tendrás que tener en cuenta la calidad de estas proteínas, pues esta no puede compararse con la de las proteínas animales. Intenta combinar cereales y legumbres. Yo, por ejemplo, mezclo lentejas con arroz o garbanzos con guisantes'', asegura la fundadora de TheCLASSYoga.com.
Pero sea cual sea la dieta escogida, es aconsejable evitar alimentos como bebidas isotónicas o gaseosas, café, té, proteína animal, azúcares, bollería industrial, alcoholes, lácteos animales, pan blanco o refinado, pastas, harina refinada, sal o sacarina.
Además, si quieres llevar a la práctica este tipo de alimentación consciente, según Lucía Liencres, es importante tener en cuenta los siguientes mandamientos: no comas productos recalentados, precocinados o procesados; cocínalos al momento, sin demasiadas elaboraciones; cocina en proporción a los que sois y a la cantidad que vayáis a comer; come despacio, intentando masticar la comida varias veces antes de tragar; combina diferentes alimentos en un mismo plato; no veas la televisión mientras comes: saborea la comida; no bebas mientras comes; intenta comer todos los días a la misma hora; trata de no saciarte (come las 3/4 partes de lo habitual o la mitad); prepara una cena ligera; intenta comer pensando en la comida que tienes en el plato, no en las preocupaciones; y come siempre que tengas hambre.