Durante el embarazo se dan muchos cambios, tanto hormonales, como físicos. En las semanas que dura la gestación, el cuerpo de la mujer adquiere un mayor volumen, especialmente en la barriga y pecho. Pero, hay otras partes del cuerpo que también ganan volumen.
La podóloga Neus Moya (@neusmoya.podologa) explica a través de uno de sus reels la razón por la que los pies de la madre pueden crecer durante el embarazo. Es una de las dudas que más observa es la preocupación relativa a las madres que afirman haber aumentado un número de pie durante su embarazo. Y, muchas de ellas no consiguen volver a su talla normal.
La experta confirma este suceso y desvela la causa de este aumento. Durante el embarazo se segrega una hormona llamada relaxina, cuya función es la de relajar los ligamentos de la pelvis para favorecer el paso del bebé a la hora de dar a luz. Este proceso no solo provoca una relajación de los ligamentos de la cadera, sino que produce el mismo efecto en en todo el cuerpo. Y los pies, no se salvan.
La segregación de relaxina relaja las articulaciones y ligamentos durante el embarazo
Sin embargo, esta hormona también afecta a los ligamentos del pie provocando que disminuya la altura del arco plantar. Moya explica que no se produce un crecimiento del pie, sino que el puente desciende y el pie se expande hasta aumentar su longitud. Por eso, es capaz de aumentar hasta una talla.
Un fenómeno que, sumado al aumento de peso del embarazo, desemboca en un crecimiento del pie. Es más, la relajación que produce la relaxina en las articulaciones puede explicar que en algunos casos, la madre no se recupere del todo.
Por otro lado, la podóloga recuerda que no se debe confundir con la hinchazón de pies, algo muy normal varios días después de dar a luz, que se atribuye a la retención de líquidos. Crecen las partes blandas, y no la estructura ósea, por lo que el pie puede volver a su tamaño original en cualquier momento.