No cabe duda de que la salud de nuestros pequeños es lo más importante y ante cualquier problema de salud, nos preocupamos de llevarles al centro médico para obtener una valoración clínica y atajarlo cuanto antes. Sin embargo, la saturación de la Atención Primaria hace que muchos papás y mamás acaben en urgencias para tener una respuesta a la afección de su hijo, contribuyendo también así al colapso de las urgencias pediátricas.
Para evitar estas situaciones y “ahorrar 3 o 4 horas en sala de espera”, el Pediatra de Urgencias y Premio Nacional de Medicina David Andina (@daandina), ha explicado en un hilo de X cuáles son 10 de los motivos de consulta más frecuentes en urgencias en niños “previamente sanos, mayores de 6 meses, con buen estado general y que tienen cita en Atención Primaria en 2 o 3 días”, y que, en realidad, no necesitarían acabar en urgencias. No obstante, recuerda a las familias que no duden en acudir a ellas si lo creen necesario.
LOS 10 MOTIVOS DE CONSULTAS
- Fiebres de corta evolución. Cuando la temperatura no es superior a los 40,5ºC, los padres pueden administrar antitérmicos en casa, si existe un buen estado general y de acuerdo a las instrucciones de su pediatra. Lo más probable es que se trate de una infección vírica, pero en cualquier caso, la temperatura basal debe comprobarse con un termómetro y no con la mano. En la mayoría de casos no sería necesario acudir a urgencias porque “las posibilidades de que tras la exploración se realice una prueba complementaria o se paute antibiótico son prácticamente nulas”.
- Dolor abdominal de corta evolución. Se trata de malestar o molestias en la tripa del niño, que se prolonga durante unas 6 - 12 horas. Los síntomas que deberían preocuparnos incluyen cuando los peques presentan aspecto pálido o enfermizo, llantos intensos, vómitos, si el dolor va a más, hay presencia de sangre en las heces o le afecta a su movimiento. El doctor recomienda administrar analgésicos y comprobar su evolución durante las próximas horas, pues si se tratara de apendicitis, los medicamentos no la camuflarían.
- Dolor de oído de corta evolución. Se refiere a las otitis que no perduran más allá de las 24 - 48 horas. Habría que acudir a urgencias si el cuadro empeora y si la oreja se inflama y se enrojece. En estos casos se pauta ibuprofeno durante dos días para realizar una posterior reevaluación, pues como indica el experto, “las indicaciones de antibiótico en otitis son cada vez más restringidas si son mayores de 6 meses”.
"Si creéis que es urgente, acudid a urgencias siempre"
- Diarrea y cambio de color en las deposiciones. La diarrea suele presentarse con la infección por gastroenteritis y se caracteriza por un aumento de las deposiciones y de consistencia más blanda. También puede ir acompañada de otros síntomas, como vómitos, fiebre, y dolor de tripa. Se debe acudir al hospital si el niño no para de vomitar y no tolera líquidos y sólidos, si los vómitos adquieren un color verdoso o contienen sangre, si las heces son muy abundantes o si el peque se encuentra muy decaído. Tal y como indica el pediatra, los colores de las deposiciones que preocupan realmente son completamente blancas, negras o con sangre abundantes. Lo normal es que en un plazo de 7 - 10 días se haya superado la gastroenteritis, con una buena hidratación.
- Tos y mocos sin dificultad respiratoria. El catarro de las vías respiratorias altas (nariz y garganta) suele presentarse con fiebre, estornudos, tos y mucosidad nasal. Ya que estas infecciones víricas se eliminan de forma lenta, el experto recomienda tener paciencia y hacerle lavados nasales, crear ambientes con humedad, ofrecerle líquidos y administrarle antitérmicos en caso de que la fiebre supere los 38 - 38,5ºC. La fiebre debería desaparecer pronto, pero si continúa después de 4 o 5 días, ya sí que se necesitaría una radiografía de tórax o tratamiento antibiótico. Asimismo, el Dr. Andina recuerda que “los jarabes para la tos y los mocos no están recomendados”.
- Lesiones en la piel. Los problemas en la piel que sí deberían preocupar son las lesiones fijas, como “vasos rotos que no desaparecen al estirar la piel (petequias) y que van aumentando de tamaño”. El pediatra recuerda que, “en niños el 99,9% de las lesiones en la piel no son urgentes”, por lo que no habría problema en esperar a que atiendan en Atención Primaria. Las visitas a urgencias son comprensibles en los casos en los que aparecen fiebre y mal estado general.
- Traumatismos craneales en niños. Es normal que nuestros peques se golpeen la cabeza en alguna caída o accidente, son situaciones que pocas veces podemos controlar, aunque sí podemos prevenir con el uso de sistemas de retención o cascos. Los traumatismos suelen ser leves y terminan con la aparición de un chichón, pero también pueden ser graves. Si después de haber administrado analgésicos y frío local, aparecen vómitos, dolor intenso, estado de confusión, somnolencia, irritabilidad, comportamientos alterados u otros síntomas preocupantes, está justificado acudir a urgencias.
En caso de ojos rojos o picazón, los lavados oculares con suero cada 4-6 horas son suficientes
- Picaduras de insectos. Todo dependerá del tipo de insectos que haya picado y la reacción de algunas personas a esas picaduras. En general, se recomienda lavar la zona con agua fresca y jabón y si el picor es muy intenso, aplicar soluciones de calamina, amoniaco o frío local (siempre que no sea en la zona de las mucosas). Tendríamos que preocuparnos si el cuerpo de nuestro hijo demuestra una reacción generalizada tras las picaduras de avispas o abejas, si pasadas las horas o los días continúa la hinchazón (con enrojecimiento, quemazón, dolor y aparición de fiebre) y si la picadura se ha producido en la boca.
- Ojo rojo. Para calmar los ojos rojos o con picor, el médico recomienda hacer “lavados oculares con suero cada 4-6 horas” mientras que esperamos la valoración médica en Atención Primaria. Si los síntomas no mejoran en 1 o 2 días o si hay sospechas de cuerpo extraño, traumatismo, dolor ocular o inflamación en el párpado grande, se aconseja acudir a urgencias.
- Lombrices. La infección de parásitos en el intestino a veces puede verse en forma de gusanos blancos alrededor del ano o en las heces y en las niñas, pueden migrar hacia la vulva. Producen picazón en la zona, especialmente de noche y en la mayoría de ocasiones no se necesitan pruebas diagnósticas, ya que es suficiente con la visualización de las lombrices. El pediatra le recetará un antiparasitario para controlar el cuadro y puesto que es una enfermedad que no conlleva riesgo de complicaciones, no hay necesidad de acudir a urgencias.