Los procedimientos estéticos cada vez abarcan más patologías y tratar cualquier área del cuerpo. Las nuevas técnicas no son solo cada vez más sencillas sino que contribuyen a nuestras inseguridades y otros problemas de salud.
La toxina botulínica es una de las más populares. También conocida como Bótox, se trata de un compuesto que promueve la firmeza o rigidez de las arrugas, normalmente de la cara. Esto se debe a su capacidad para relajar temporalmente los músculos e impedir las expresiones que crean pliegues en nuestra piel. Su eficacia está en el bloqueo de las señales nerviosas que esta sustancia realiza con la liberación de la acetilcolina, un neurotransmisor.
A pesar de que el área por excelencia para implantar este protocolo es el rostro, cada vez es más frecuente en otras partes del cuerpo, como la zona íntima.
La tóxina botulínica bloquea las señales nerviosas de los músculos
Un procedimiento estético de Estados Unidos ha ganado popularidad en los últimos años, es el Scrotox, y consiste en la inyección de bótox en la zona del escroto para rejuvenecer los testículos y dar una apariencia de mayor volumen.
Hablamos en Estetic con el Dr. François Peinado Ybarra, Jefe de Servicio de Urología y Coordinador de la Unidad del Varón del Hospital Universitario Ruber Juan Bravo 39 para conocer más sobre esta moda que muchos famosos como el futbolista, Cristiano Ronaldo, se han realizado.
¿EN QUÉ CONSISTE EL 'SCROTOX'?
Esta práctica consiste en inyectar bótox en la zona del escroto con el objetivo de rejuvenecer la zona. Esta nueva tendencia usa la toxina botulínica para paralizar los músculos del escroto, la bolsa que cubre los testículos, con el fin de reducir las arrugas y dar una apariencia más firme, así como homogénea y juvenil. Como el doctor resume: "dando una apariencia más suave y relajada". Con estas inyecciones se evita que el escroto se contraiga, dándose de sí y descolgándose.
Y es que, el origen de este protocolo tenía fines médicos. En algunos países se emplea para reducir el dolor e hinchazón crónica relacionada con algunas afecciones, así como tratamiento para la sudoración excesiva (hiperhidrosis). La toxina botulínica es uno de los tratamientos más comunes para frenar el exceso de sudoración en partes de cuerpo como las manos o las axilas.
En Estados Unidos, el Scrotox es un procedimiento muy demandado, incluso está aprobado por la Federación de Drogas y Alimentos de Estados Unidos (FDA). No obstante, en España no se realiza. Según nos cuenta François Peinado, la razón es “la falta de demanda”. Sin embargo, el urólogo asegura que la patología escrotal típica es la contraria: “los pacientes solicitan empequeñecer el escroto dado que con el tiempo la piel del misma se relaja y cuelga mucho más. Realizamos un procedimiento llamado Escrotoplastia”, también conocida como lifting de escroto.
Por lo general, el Scrotox tiene efectos temporales. El Dr. Peinado añade que sus efectos “generalmente duran alrededor de tres a cuatro meses y se disuelven sin dejar restos permanentes”.
INCONVENIENTES
En cuanto a los posibles efectos secundarios, estos son muy reducidos y no van más allá de los efectos secundarios que una inyección cualquiera implica. Peinado los enumera: “Dolor en el lugar de la inyección, hematomas, hinchazón, y una disminución temporal en la producción de esperma debido a la alteración de la temperatura testicular”.
También, le preguntamos al urólogo por su incidencia en la fertilidad y actividad sexual: “Algunos pacientes informan una mayor sensibilidad y mejora en su vida sexual tras el procedimiento. Aunque, no hay datos sobre la fertilidad al alterar posiblemente la regulación de la temperatura de los testículos”.
En esa línea, la musculatura del escroto se contrae y relaja para mantener una temperatura constante en los testículos. Por eso, una alteración de estos músculos puede afectar a la producción de espermetazoides. Finalmente, el doctor recalca la falta de evidencia científica en cuanto a los efectos secundarios, así como el aumento de posibles lesiones.