El cuidado de la piel no debe ser algo exclusivo del mundo femenino, pues los hombres no están exentos de los efectos del paso del tiempo, del envejecimiento, de la piel sensible, manchas, brotes de acné, puntos negros… De hecho, la barba puede influir mucho en las condiciones de la barrera cutánea, ya que muchas veces ocasiona quistes y problemas de sequedad o acumulación de suciedad.
Así que, si eres hombre, seguir una higiene facial o skincare también debe convertirse en rutina. Es cierto que cada piel tendrá unas necesidades específicas, dependiendo de si es joven, madura, mixta, seca o grasa, pero hay unos pasos básicos que no deberían saltarse eligiendo los productos adecuados. Te los contamos a continuación.
RUTINA DE SKINCARE BÁSICA PARA HOMBRES
Para garantizar un buen cuidado del cutis, este es el paso a paso que todo hombre debería seguir:
- El primer paso de todos tiene que ser la limpieza de los poros, para eliminar la suciedad y las partículas nocivas. Lava tu rostro con un limpiador facial suave y adecuado para tu tipo de piel, masajeando suavemente el producto con movimientos circulares. Luego, enjuaga con agua tibia y seca dando palmaditas con una toalla suave.
- A la limpieza puedes sumarle la exfoliación entre una y dos veces por semana, especialmente si tienes la piel grasa o con tendencia a la aparición de puntos negros. Este paso asegura una limpieza profunda de los poros, eliminando células muertas y evitando su obstrucción de los poros. Puedes utilizar un exfoliante facial, aplicándolo con movimientos circulares suaves y enjuagando bien con agua. Comprobarás que mejorará la textura de tu piel.
- A continuación, llega el afeitado. Los expertos recomiendan hacerlo después de la limpieza o exfoliación para evitar infecciones o irritaciones con los posibles cortes. Para ello, utiliza un gel o espuma de afeitar y una maquinilla o cuchilla limpia y afilada. Asegúrate de afeitar en la dirección del crecimiento del vello para evitar la irritación y que se enquisten las fibras capilares, dando lugar a pequeñas espinillas. Una vez hayas terminado, enjuaga con agua fría para cerrar los poros y aplica un bálsamo o loción que calme la piel.
El exfoliante es un paso más agresivo con la piel, así que sólo se recomienda realizar entre 1 y 2 veces por semana
- El siguiente paso debe ser tonificar la barrea cutánea con un tónico facial. Aplícalo en un algodón y después pásalo suavemente por todo el rostro. Así ayudará a equilibrar el pH de la piel y a cerrar los poros, evitando que se acumule más suciedad en ellos.
- Para nutrir la piel y dejar atrás la sequedad después de estos pasos algo más agresivos, llega el momento de la hidratación. Utiliza una crema hidratante facial adecuada a tus necesidades, masajeándola suavemente con movimientos circulares ascendentes. Asegúrate de cubrir toda el área del rostro y el cuello. Si tienes la piel seca, te recomendamos el uso de una crema más rica, mientras que es de tendencia grasa, busca una crema más ligera o un gel hidratante. Gracias a la hidratación, retrasarás el envejecimiento de los tejidos cutáneos y mejorarás su elasticidad.
- Por último, pero no menos importante, selecciona un protector solar facial con un factor de protección elevado para evitar los daños ocasionados por los radicales libres y los rayos UV. Asegúrate de cubrir todas las áreas expuestas del rostro, incluyendo las orejas y el cuello. También combatirás el fotoenvejecimiento celular.
Recuerda que tu dermis tiene unas condiciones específicas, así que permanece atento a las etiquetas de los productos y asegúrate de que respetan el bienestar de tu piel. Si tienes dudas o preocupaciones específicas, no dudes en consultar a un dermatólogo para obtener recomendaciones personalizadas. ¡Es cuestión de salud!