Aunque tradicionalmente el mundo de la belleza y de las intervenciones estéticas esté más asociado al público femenino, el cuidado corporal no es algo exclusivo de mujeres. Los tratamientos de belleza están cada vez más de moda entre los hombres, tal y como arroja el estudio de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME), que concluye que 2 de cada 10 hombres se someten a tratamientos estéticos.
Pero al igual que a las mujeres, la perfección del rostro es también una de las máximas preocupaciones entre los hombres, y en concreto la reducción de los signos de la edad. Y con ello, la búsqueda de tratamientos que consigan unos resultados naturales y que eviten las caras hinchadas. Así que hoy te vamos a hablar de un tratamiento ideal que cumple con esos dos objetivos: te lo contamos todo sobre la neuromodelación facial.
¿QUÉ ES LA NEUROMODULACIÓN FACIAL?
La neuromodulación facial es un tratamiento ideal para difuminar las arrugas de expresión y combatir los signos de envejecimiento, que se consigue a través de infiltraciones de neuromodulador (un material de relleno) en zonas específicas del rostro. Las doctoras Mar Mira y Sofía Ruiz del Cueto, de la Clínica Mira + Cueto, advierten de que los resultados son “innegables”, “casi inmediatos”, y de que la clave para lograr un efecto natural está en “no congelar la musculatura para que se mantenga una expresión suave”.
Un aspecto a tener en cuenta es que los hombres necesitarán más infiltraciones que las mujeres para conseguir ese efecto natural porque “su tejido de la cara suele ser más pesado, lo que hace que los músculos que realizan las expresiones faciales sean más fuertes”. En este caso y según las doctoras, los músculos más grandes y fuertes y las arrugas más profundas requieren de una mayor cantidad de neuromodulador para lograr la relajación muscular.
El neuromodulador se inyecta con una aguja fina, por lo que es un tratamiento indoloro
Con esta técnica, las zonas que más tratamiento requieren son las líneas glabelares de la frente, las comúnmente conocidas como líneas 11 o del entrecejo. También las líneas horizontales de toda la frente y las patas de gallo, ya que son las que más se acentúan con la edad. Este tratamiento se puede combinar con inyecciones de ácido hialurónico en la barbilla, mandíbula y zona perioral (alrededor de la boca).
Si quieres seguir siendo tú mismo pero más favorecido, este tipo de tratamiento es para ti porque además de rápido, es indoloro al realizarse con una aguja muy fina. Aunque según las doctoras, si el paciente está temeroso, se puede aplicar anestesia tópica. Los resultados en la piel se prolongan entre 4 y 6 meses.