¿Cuáles son los métodos de depilación masculina más populares? Consejos para el cuidado posterior

La depilación supone un proceso irritativo para la piel, por lo que es importante seguir una serie de cuidados posteriores que reparen el daño

Hombre que puede recurrir a los métodos de depilación masculina (Foto. Freepik)
Hombre que puede recurrir a los métodos de depilación masculina (Foto. Freepik)
16 mayo 2024 | 10:00 h
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Con el verano a la vuelta de la esquina, son muchos los chicos que en estas semanas se animan a quitarse el vello corporal. Por estética, por higiene, por comodidad… Sea cual sea el motivo, lo cierto es que existen diferentes métodos de depilación a los que pueden recurrir. Los más populares son los siguientes:

CUCHILLA

La depilación con cuchilla es una de las técnicas más antigua y, ahora, la más extendida para resolver el problema en cuestión de minutos. Permite depilar el vello de cualquier parte del cuerpo de forma indolora, ya que corta el pelo por la fibra capilar, sin retirar la raíz. Sus resultados son temporales y es probable que en uno o dos días, el vello vuelva a aparecer.

CREMA DEPILATORIA

Las cremas depilatorias se aplican sobre la piel para que actúen directamente sobre la queratina del pelo. Los ingredientes de estas cremas destruyen esta sustancia y las proteínas de la fibra capilar, sin arrancar la raíz. Aunque es un procedimiento indoloro, también ofrece resultados temporales. Sin embargo, no puede utilizarse en todas las zonas del cuerpo, como pueden ser las zonas sensibles. Además, hay que tener especial cuidado con su utilización, ya que pueden generar alergias en pieles sensibles o incluso quemaduras si se excede el tiempo de aplicación recomendado.

DEPILACIÓN CON HILO

La depilación con hilo utiliza un hilo de algodón o de seda para enrollarlo sobre el vello y arrancarlo de raíz. Esta técnica milenaria la aplican profesionales de estética y se utiliza sobre todo en cejas o en rostro, puesto que es suave con la piel y menos dolorosa que otros métodos, aunque más laboriosa. Sus resultados pueden prolongarse en torno a 1 o 2 semanas.

DEPILACIÓN CON CERA

La depilación con cera fue uno de los métodos de depilación estrella durante las últimas décadas antes de la aparición del láser, pero hoy todavía sigue siendo uno de los más demandados, tanto por hombres como por mujeres. Se utiliza con cera generalmente calentada para extenderla sobre la piel y, después, retirarla de un tirón, llevándose consigo los pelos de la zona en la que se ha aplicado. Además de retirar el vello de raíz, es un método que exfolia la piel. Sin embargo, es un procedimiento bastante doloroso y en unas 2 semanas el vello corporal volverá a asomar.

DEPILACIÓN CON MAQUINILLAS

Este tipo de depilación lo ofrecen las maquinillas eléctricas que, cuando se deslizan por la piel, extraen los pelos de raíz. El cabezal está conformado por unos discos giratorios que, a su paso por la piel, agarran las fibras capilares, arrancándolas de cuajo. Es una opción más molesta, ya que depende de la velocidad de rotación de los discos para extraer el vello, y sus resultados pueden extenderse en torno a 2 semanas.

FOTODEPILACIÓN O LUZ PULSADA

La fotodepilación utiliza la tecnología IPL o Luz Pulsada que, a través de un dispositivo deslizado sobre la piel rasurada, emite un espectro de luz. Esos rayos son absorbidos por la melanina, la sustancia que da color a la dermis y al cabello. Allí, atacan directamente al folículo piloso, debilitando e inhibiendo el crecimiento del vello capilar. Es un método depilatorio definitivo, aunque algo molesto, que en unas 8 sesiones ya permite observar resultados visibles.

Tras el daño causado por la depilación, se recomienda hidratar y regenerar la piel 

No obstante, los resultados dependen del color del pelo (presenta mayor efectividad en tonos oscuros) y de otros factores, como la fase de crecimiento e la que se encuentre el cabello o posibles desequilibrios hormonales. Además, es probable que con el paso del tiempo se necesiten sesiones de repaso para mantener los resultados en las zonas en las que aún crecen algunas fibras capilares.

LÁSER

La depilación láser utiliza un procedimiento similar al de la Luz Pulsada, ya que también actúa directamente sobre la melanina del folículo piloso. El dispositivo láser que se usa sobre la piel, previamente afeitada, emite unas ondas de luz que inciden directamente sobre los folículos, para debilitarlos e impedir el crecimiento de vello corporal. Cuanto más oscuro es el cabello, mayor es su eficacia.

Aunque también entran en juego factores como la coloración de la piel, su grosor y los problemas hormonales, existen diferentes tipos de láser que se adaptan a las necesidades de cada persona. Sus resultados pueden apreciarse transcurridas unas 6 sesiones, pero se necesitan más para notarlos de manera definitiva. El proceso es un poco molesto, ya que pueden sentirse pequeños pinchazos cuando el láser actúa sobre el folículo o incluso sensación de quemazón. Sin embargo, todo depende de la tolerancia del paciente.

¿CÓMO CUIDAR LA PIEL DESPUÉS DE LA DEPILACIÓN?

Después de depilar el vello corporal, sea cual sea el método empleado, conviene cuidar la piel para repararla tras el proceso irritativo. Para ello, se recomienda limpiar bien con agua fría e hidratar con ingredientes o cremas regeneradoras, como pueden ser el gel de aloe vera o el aceite de almendras, también con productos antiinflamatorios que alivien las rojeces y las molestias,entre los que se recomienda el ácido salicílico o la árnica.

Asimismo, es importante aplicar protector solar cuando se salga al exterior y tener cuidado de no tomar el sol en los días previos y posteriores a la depilación si se ha empleado el láser o la luz pulsada. De lo contrario, puede haber daño solar, manchas y quemaduras en la piel.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.