Los polvos bronceadores son el mejor aliado en nuestra rutina de maquillaje, perfectos para el verano; sin embargo, pueden convertirse en nuestro mayor detractor físico si no sabemos escoger el tono y textura que mejor encaja en nuestra piel.
Para Larisa Nastase, maquilladora profesional y directora creativa de Larisa Studio, existen algunos trucos para acertar con los polvos bronceadores.
Uno de ellos es no pasarse con el tono. La mejor opción es escoger un tono marrón para que quede más natural en la piel; hay que huir siempre de los tonos naranjas. Un truco para acertar con el color es probarlo en el hueso de la mandíbula.
Los polvos bronceadores son el mejor aliado en nuestra rutina de maquillaje, perfectos para el verano
De igual forma, no debes olvidarte de broncear el cuello y bajar hasta la clavícula e, incluso, hasta los hombros.
También es importante acertar con los polvos bronceadores según cada tipo de piel: pieles claras (tonos melocotón suaves); pieles oscuras (colores marranos o chocolate); pieles cetrinas (marrones dorados); pieles amarillentas (ocres y anaranjados); y pieles rosadas (marrones suaves).
Si tienes la piel con estos tipos y es, además, muy mate, puedes dar toques con tonos tierra, caramelo y cobre. Además, es importante tener en cuenta distinguir los tipos de piel según el nivel de grasa: para pieles secas es conveniente utilizar productos en crema porque dan más luz y aspecto de piel jugosa; y para pieles grasas se aconseja utilizar productos en polvo para que la piel quede más matizada y le dé el brillo justo.