En los meses de verano, la piel requiere un cuidado más exhaustivo que compense la exposición a factores externos como la radiación solar, el cloro de las piscinas o la sal, detonantes de la deshidratación, y responsables de la aparición de machas y arrugas, generando un aspecto opaco y con falta de luminosidad del rostro.
Y es que, la subida de temperaturas hace que nuestra piel no logre absorber las texturas densas y pesadas repletas de nutrientes tan características del invierno. En esta época del año, se hace imprescindible incorporar al neceser formulaciones cargadas de principios activos que logren hidratar la piel y protegerla de todo el daño procedente del exterior, teniendo muy en cuenta la prevención, para que una vez haya terminado el verano, no tengamos que someter nuestra piel a tratamientos agresivos.
PRINCIPIOS ACTIVOS DE VERANO
-Bakuchiol. El bakuchiol es una alternativa al retinol que ha demostrado clínicamente ser apta para el uso en las pieles más sensibles. Mientras que molecularmente no tiene semejanza estructural con los retinoides, los estudios demuestran que es capaz de regular la piel de forma genéticamente similar al retinol, un principio activo altamente alabado dentro del sector beauty por su capacidad para rejuvenecer la piel, iluminar e unificar el tono, y su versatilidad. Por su parte el bakuchiol es fotoestable a corto plazo, lo que significa que se puede utilizar día y noche, siendo la alternativa perfecta para aquellos que no pueden usar vitamina A o que temen hacerlo antes de la exposición solar.
Este componente está presente en productos como sueros y cremas y, en palabras de la directora técnica de Medik8, Elisabeth San Gregorio,''es capaz de prevenir y restaurar el envejecimiento prematuro, ayudando a estimular la producción de colágeno y elastina. La capacidad de bakuchiol para minimizar la síntesis de melanina se combina con el bloqueo de las vías inflamatorias dentro de la piel, que mejora el tono de la piel, dejándola con aspecto calmado''.
En los meses de verano, la piel requiere un cuidado más exhaustivo que compense la exposición a factores externos
-Vitamina C. Una de las maneras más eficaces de mejorar la luminosidad del rostro y reducir las manchas solares es la vitamina C, famosa por su gran capacidad para mejorar la apariencia del tejido. Esta vitamina es un superingrediente antienvejecimiento, encargado de proporcionar un potente escudo antioxidante contra los agresores externos y los radicales libres.
Centrándonos en este principio activo, cabría destacar la poderosa vitamina C Ester ''una forma de vitamina C, más potente, altamente estable, rica en antioxidantes y menos abrasiva, encargada de mejorar la apariencia del rostro potenciando el colágeno, suavizando, iluminando y reduciendo las manchas y el tono desigual de forma visible. A diferencia de la vitamina C tradicional, la vitamina C Ester es soluble en grasa y fácilmente absorbible, por lo que aporta los máximos beneficios antioxidantes a la piel'', comenta Raquel González, directora de educación de Perricone MD.
-Ácido hialurónico. Para mantener la piel con una hidratación óptima durante los próximos meses, donde las temperaturas superan los 35º, debemos optar por texturas ligeras con baja concentración de nutrientes, favoreciendo así la hidratación y evitando una saturación del tejido.
Existe una sustancia ultra-hidratante que ha logrado posicionarse como uno de los principios activos más amados dentro del sector beauty por su alta capacidad para hidratar la piel: el ácido hialurónico. "Este principio activo se produce de forma natural en nuestra piel, es una molécula de azúcar de gran tamaño. Es el encargado de completar los huecos entre las células de la piel, engrosar el cutis y al mismo tiempo mantener su estructura en su sitio. Increíblemente, también tiene capacidad para contener 1.000 veces su propio peso en agua atrayendo moléculas de H2O a sí mismo como un imán", manifiesta Elisabeth San Gregorio.
-Pectina de manzana. La combinación de sus componentes hace de la pectina de manzana un producto natural antiedad perfecto por su poder antioxidante y refrescante, que relaja la piel y la musculatura, aportando hidratación y flexibilidad de manera duradera en la piel.
Gracias a su alto contenido en pectina, la manzana, tiene la capacidad de retener la hidratación, convirtiéndose en un gran humectante. "Contiene altas propiedades antioxidantes para neutralizar los radicales libres gracias a sus elementos fitoquímicos como los flavonoides y polifenoles. Se trata de un principio activo biodisponible muy apropiado para pieles sensibles. Evita el envejecimiento de los tejidos gracias a su alta capacidad para regenerar las fibras elásticas y encimas, logrando rejuvenecer la piel", comenta Estefanía Nieto, directora técnica de Omorovicza.