Aunque con la pandemia del coronavirus el teletrabajo gano terreno sobre el trabajo presencial, lo cierto es que de una manera u otra seguimos estando expuestos a la luz azul de las pantallas, ordenadores o teléfonos móviles. Y esto, afecta a nuestra visión que se posiciona como la gran perjudicada.
Entre los principales efectos nocivos que tiene para la salud se encuentran los siguientes:
Estrés oxidativo. La luz azul estimula el aumento de radicales libres y oxígeno, algo denominado también estrés oxidativo, responsable de la disminución de las síntesis de colágeno y elastina. Como consecuencia, la piel pierde elasticidad, firmeza y luminosidad, lo cual conlleva a la aparición prematura de signos del envejecimiento.
Deshidratación. Provoca una disminución de las moléculas que se encargan de mantener los niveles de agua causando que la piel se deshidrate y pierda elasticidad.
Hiperpigmentación. Una elevada exposición a la luz azul activa los melanocitos, lo que puede propiciar la aparición de manchas en la piel.
Envejecimiento. Es uno de los principales factores que causan el envejecimiento prematuro.
¿CÓMO COMBATIRLO?
Antes estas situaciones lo mejor es tomar las medidas necesarias para que no cause daño a la vista. El oxígeno es importante para el proceso de la regeneración celular de la piel. Como ya hemos mencionado, uno de los principales efectos de la luz azul es el estrés oxidativo, por lo que el uso de una crema oxigenante es beneficioso para que la piel pueda respirar, regenerarse y mantenerse sana.
La crema Oxigenante Activadora de Juventud de Germaine de Capuccini aportará una dosis extra de oxígeno a la piel para poder potenciar las funciones renegadoras para defender la piel de cualquier enemigo silencioso, contaminación también incluida.