"Nos sentimos bien, pero la luminosidad de nuestro rostro y la densidad no es la misma de antes". Son muchas las mujeres que se sienten así y esto es lo que ha motivado a Clarins a crear su nuevo tratamiento iluminador y embellecedor: Crème Rose Lumière.
Su fórmula combina los mejores ingredientes generadores de luminosidad inmediata con potentes activos redensificantes. Además, cuenta con una textura color 'shocking pink', para transmitir el mensaje de que a cualquier edad es posible sentirse joven, fuerte y radiante.
Los ácidos de flor de hibiscus sabdariffa, muy suaves, facilitan la eliminación rápida y suave del exceso de células muertas para avivar la luminosidad de la tez, favorecer la renovación de la piel y preservar su textura uniforme. Mientras más lisa y flexible se encuentre la epidermis, está más uniforme y refleja más luz.
Además, la tez luminosa se consigue con el juego de los nácares iluminadores. Un juego de cuatro nácares seleccionados por los Laboratorios Clarins (azul, rojo, amarillo y verde) que al combinarse reflejan la luz blanca, el color universal de la luminosidad y del resplandor, que se adapta a todos los tonos de piel. ¿El plus Clarins? Cerca de 140 pruebas se efectuaron para evaluar la proporción ideal de color de cada nácar para reflejar una luz perfectamente blanca. Asimismo, día tras día, un derivado de vitamina C contribuye a atenuar las manchas de pigmentación para conseguir una tez perfectamente uniforme.
Crème Rose Lumière cuenta con las propiedades redensificantes del extracto de harungana bio y de un tetrapéptido antiedad, que se combinan con el efecto alisante de las perlas de relleno. En todos los niveles, la piel gana densidad y tonicidad, y recobra el aspecto rebosante de las pieles más jóvenes, factor clave para una mejor difusión de la luz.
Los resultados después de 28 días no dejan dudas el 82% de las mujeres notó un efecto buena cara al instante; y el 83% constata luminosidad rosada en la tez después de siete días.