¡Atención! Porque al igual que cuando llegan los meses de verano hacemos el cambio de armario reglamentario y sacamos la ropa más ligera para combatir el calor, también debemos aplicar unos pasos concretos con el objetivo de proteger nuestra piel del sol. El cambio en las condiciones ambientales y en nuestra forma de vida hace que nuestra piel se adapte a ellas y no nos queda otra que cuidarnos.
Esto es lo que conocemos como ‘cambio de armario cosmético’ y se trata de introducir unas pequeñas modificaciones en nuestra rutina facial, de manera que podamos prevenir problemas tales como la aparición de brotes de acné por sudoración, la producción excesiva de sebo, manchas y quemaduras solares. La doctora Andrea Combalia (@pielsanaincorporesano), dermatóloga y tricóloga, nos deja tres consejos fundamentales en su perfil de Instagram:
TRES PASOS IMPRESCINDIBLES
La experta en el cuidado de la piel nos da 3 consejos fundamentales que no pueden altar en nuestra rutina durante esta época del año:
- Fotoprotección innegociable: si bien es cierto que deberíamos utilizar la fotoprotección todos los días del año, en verano la radiación ultravioleta es más elevada y los rayos inciden con más fuerza. Así que no hay excusas, debemos protegernos cada mañana aplicando crema solar en rostro y cuerpo, reaplicando en caso de que sea necesario.
- Elegir texturas que sean más fluidas: las temperaturas elevadas hacen que nuestras glándulas produzcan más sebo y sudor, una condición que ocasiona la obstrucción de los poros con la posible aparición de infecciones y granitos. Para evitar las imperfecciones sobre nuestra piel, la dermatóloga nos recomienda utilizar emolientes que sean con texturas fluidas y no comedogénicas que no aporten más grasa a la piel.
Los cosméticos no comedogénicos son aquellos que están formulados sin ingredientes que favorezcan la producción de sebo natural
Las texturas fluidas indican que un producto se extiende con facilidad y que es fácilmente absorbible por la piel, siendo ideal para todo tipo de pieles. Por otro lado, los cosméticos no comedogénicos son aquellos que están formulados sin ingredientes que favorezcan la producción de sebo natural, y que por lo tanto, no favorecen la aparición de puntos negros y granitos.
- Cuidado si estás incorporando ácidos o activos fotosensibilizantes: se refiere a productos que, combinados con la radiación ultravioleta, pueden ocasionar problemas cutáneos como alergias, manchas, ampollas o quemaduras. En cambio, fotosensible es toda aquella sustancia que se oxida al entrar en contacto con la luz del sol.