La industria cosmética mueve unos volúmenes extraordinarios en el mercado a nivel mundial. Según los datos de la consultora Grand View Research, se estima un crecimiento anual de un 9,1% de cara a 2030, fecha para la que se esperan alcanzar los 43.245 millones de euros de facturación. Y ante estas perspectivas tan positivas, también cabe señalar que cada vez existe una mayor conciencia sobre el cuidado del medio ambiente y contra el maltrato animal y esta tendencia queda reflejada en la forma de comprar de los consumidores.
Actualmente, un 77% de los consumidores dice tener en cuenta el origen de los ingredientes en los cosméticosque compra. Esto quiere decir que 8 de cada 10 consumidores se preocupan por el impacto medioambiental que genera la industria, por lo que las marcas y los fabricantes deben adaptarse a este compromiso. Por lo tanto, este escenario presenta una oportunidad de negocio, dentro de un sector que mueve cerca de los 2.335 millones de euros anuales en España y en el que operan un total de 577 fabricantes de productos cosméticos y de perfumería.
COSMÉTICA NATURAL COMO OPORTUNIDAD DE NEGOCIO: TRES RECOMENDACIONES
A pesar de que pueda dar la sensación de fuerte competencia en la industria cosmética, Ariana Nieves Fernández, farmacéutica y empresaria en el sector del cuidado personal, explica que “existen grandes posibilidades para hacerse un hueco en este mercado, siempre y cuando se tenga una actitud emprendedora que rompa con el negocio fácil y ayude a crear un nuevo modelo de negocio”. Al mismo tiempo, destaca que la cosmética natural y orgánica son “tendencia en el sector” y esta línea podría hacer “triunfar a todos aquellos productos que aporten beneficios para el usuario y que estén en sintonía con el planeta”.
Ariana profundizará más sobre este tema el próximo 17 de septiembre en la masterclass‘Emprender en cosmética, crear riqueza desde 0’, puesta en marcha por la CEMP (Centro Europeo de Másteres y Posgrados) y que liderará ella misma. Pero adelanta tres recomendaciones ineludibles para todo el que quiera iniciarse en la industria cosmética:
- La sostenibilidad como eje central. Estamos viviendo un cambio de paradigma en el que, como mencionábamos, los consumidores prefieren los productos que respetan el medio ambiente en toda la cadena de su producción: desde la elaboración del producto hasta su envasado o packaging y el método logístico de transporte. Por lo tanto, esta filosofía debe englobar toda la cadena de valor.
Para 2030 se espera que la industria cosmética mundial alcance los 43.245 millones de euros de facturación
- Hacer comunicación de marca. Para trasladar ese mensaje eco-friendly, así como todas las propiedades de nuestro producto, es primordial establecer una estrategia de comunicación clara, directa y veraz, que transmita esa información y los valores de sostenibilidad de cada acción. Asimismo, conviene aportar datos sobre los intermediarios para sumarle valor.
- Apostar por el modelo online. En la era digital que estamos atravesando, el marketing es una de las herramientas más útiles, también cuando se trata de productos de cosmética. Hay que pensar en el gran alcance de los influencers, de las opiniones de los usuarios y en la capacidad de transmitir el potencial de un producto. De ahí la importancia de tener una página web que permita el comercio online, con un diseño atractivo y responsive, que transmita los valores de la marca y que vaya acompañada de una buena estrategia de comunicación en redes sociales.