Con la llegada de septiembre viene el fin de las vacaciones y, con ello, vuelven las rutinas o ‘rentrée’. Pese a que la época de descanso está asociada a múltiples efectos beneficiosos, estos son temporales y desaparecen rápidamente cuando se vuelve al trabajo. No es de extrañar que, ante esto, la gran mayoría de personas experimenten un aluvión de sensaciones, tanto positivas como negativas, provocadas por este trastorno adaptativo.
“Es habitual sentir entusiasmo, impaciencia, dudas, miedo ante lo desconocido, excitación ante la promesa de algo nuevo, nostalgia de las vacaciones o tristeza de no haberlas aprovechado lo suficiente”, explica Ananda Ceballos, Doctora en Filosofía y Psicóloga, experta en mindfulness y colaboradora de Petit BamBou. Dentro de este cúmulo de sentimientos, hay personas que afrontan la situación haciéndose nuevos propósitos, como si de un comienzo de año se tratase. Sin embargo, hay una cara menos bonita, y las ganas y la voluntad se esfuman rápidamente.
La mejor forma de encauzar la situación es practicar la meditación, que enseña a acoger los sentimientos incluso cuando parecen contradictorios
Para evitarlo, es importante distinguir siempre, dentro de los proyectos, entre lo que es urgente y lo que es importante. “La importancia debería definirse en función de nuestros intereses, necesidades, valores y aspiraciones, lo que realmente nos define”, opina la colaboradora de Petit BamBou. Además, es fundamental que, ante un nuevo propósito, nos planteemos la pregunta de ‘¿para qué?’ “Si le damos un sentido a nuestros objetivos, nos resultará más fácil visualizar el resultado que queremos conseguir y esto contribuirá a mantener la motivación a largo plazo”, aclara Ananda Ceballos.
Cuando ya hemos logrado enfocarnos, puede ocurrir también que la firmeza para cumplir con lo pensado se venga abajo y aparezca el sentimiento de culpa, el desánimo y el sentimiento autodestructivo. La experta explica que esto tiene un efecto terrible sobre la autoestima, siendo el mayor obstáculo a la hora de alcanzar los objetivos. Pese a todo, la mejor forma de encauzar la situación es practicar la meditación, que enseña a acoger los sentimientos incluso cuando parecen contradictorios.
SUPERAR LA 'RENTRÉE', FÁCIL CON ESTOS TIPS
Paralelamente a esto, si queremos afrontar la vuelta a la rutina de la forma más positiva posible, es importante seguir los consejos que Ananda Ceballos ofrece.
- Asegúrate de que tus objetivos son realmente tuyos, que los deseas más allá de lo que piensen los demás.
- Ancla tus metas en la realidad, sin dejar volar la imaginación hacia cosas inalcanzables.
- Establece tus objetivos en positivo, evitando las frases negativas, que nuestro inconsciente no entiende.
- Ponte retos a corto plazo y a largo plazo, pues no conviene querer tener todo de manera inminente, pudiendo caer en la frustración.
- Aprende a identificar la voz de tu “crítico interior”, que será quien intente sabotear los esfuerzos.
- Aprende a gestionar tu tiempo, haciendo un “retro-planning” de cada objetivo, definiendo los deadline de cada tarea, y evitando la procrastinación.
- Deja ir el control, pues aferrarnos a cómo queremos que las cosas ocurran condiciona nuestra actitud y favorece el estrés.
- Encuentra una persona que te anime, pues será más fácil continuar.
- Recompénsate de vez en cuando, ya que no todo ha de ser sacrificio.