Con el punto y final a sus vacaciones, Violeta Mangriñán empieza septiembre de vuelta a la rutina y muy ilusionada: se acaba de mudar a Madrid, continúa preparándose para dar la bienvenida al mundo a su segunda hija y, como muchas de nosotras, acaba de retomar el gimnasio para seguir cuidándose físicamente en la recta final del embarazo. Sin embargo, volver al deporte siempre va a tener una temida consecuencia: las agujetas.
La modelo e influencer ya ha pasado por la primera toma de contacto “después de un año prácticamente sin hacer deporte”, como ha explicado a sus seguidores a través de Instagram. Pero ahora que se ha instalado definitivamente en Madrid, espera recuperar la constancia y pasarse todas las semanas por el gimnasio. Lo que seguro que no querrá recuperar son las agujetas que ha tenido durante esta primera sesión de deporte: “Me duele hasta el alma”, comentaba.
¿CÓMO COMBATIR LAS AGUJETAS?
Ahora que es época de retomar la actividad deportiva, como ha hecho Violeta Mangriñán, debes saber que hay algunas formas de mantener a raya las agujetas o, al menos, de hacer que no sean tan fuertes. Lo cierto es que circulan muchos mitos extendidos acerca de estos dolores musculares, así que vamos a hacer un repaso por todos ellos para ver qué métodos funcionan de verdad y a cuáles no deberíamos darles la oportunidad:
- Beber agua con azúcar: este es, quizás, el mito más extendido acerca de las agujetas. Hace un tiempo se pensaba que el azúcar favorecía la disolución de los cristales de ácido láctico, la sustancia que producimos en los momentos de máximo esfuerzo deportivo. Sin embargo, esta teoría ya se ha desmontado. Lo que sí puede ayudar a aliviar (¡aunque no combatir!) el dolor muscular, es tomar bebidas con sales minerales como las isotónicas para restablecer sus niveles en el organismo y acelerar el proceso de recuperación.
- Calentar y estirar los músculos: tanto el calentamiento como el estiramiento deben formar parte de cualquier rutina de entrenamiento, ya que activan los músculos y reducen el riesgo de lesiones. Sin embargo, lamentamos informarte de que realizar estos pasos no evitará que desarrolles agujetas posteriormente. Estirar tus músculos en reposo tampoco será efectivo para no sufrir su dolor tan característico.
La regla del 10% consiste en ir incrementando tiempo e intensidad de entrenamiento en un 10% cada semana para favorecer la adaptación del cuerpo
- Masaje muscular: aplicar un masaje en las zonas afectadas favorecerá una recuperación más rápida, así como aliviará la sensación de fatiga muscular. Deben ser masajes con presión leve, para no romper aún más las microfibras musculares responsables de causar las agujetas. Aquí puedes incorporar la aplicación de cremas deportivas o con efecto frío para mejorar las sensaciones.
- ¿Más ejercicio?: ¿Cuántas veces hemos escuchado eso de que “hacer más ejercicio cura las agujetas?”. Estamos de nuevo ante un mito que no es para nada recomendable. Realizar más deporte sólo contribuirá a agravar el dolor muscular y a romper esas microfibras musculares de las que hablábamos. Lo que sí puedes hacer es seguir la ‘regla del 10%’, es decir, ir incrementando el tiempo y la intensidad del ejercicio en un 10% cada semana para que el cuerpo se vaya adaptando progresivamente al nuevo esfuerzo sin un colapso que derive en agujetas.
- Descanso: se va a convertir en el método infalible para convertir las agujetas. Gracias al reposo, tu cuerpo y musculatura podrán recomponerse sin problema y en unos 3 - 5 días volverás a sentirte bien y sin ningún tipo de dolor. Esto será sinónimo de que las zonas afectadas están de nuevo recuperadas, por lo que podrás volver al ataque.