Cada año se diagnostican más de 1.5 millones de casos de VIH o Sida en el mundo. Una cifra, que pese a ir reduciéndose en los últimos años sigue siendo preocupante. Cada día, 4000 personas se infectan con el VIH, entre ellos 1100 jóvenes de entre 15 y 24 años de edad. Acabar con ella, es uno de los objetivos que tiene la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el año 2030. Sin embargo, acabar con ella parece un reto más difícil de lo que se podía esperar.
Por ejemplo, desde Unicef recuerdan que en el año 2020, un niño se infectó de VIH cada dos minutos, lo cual hace indiciar que en un día 720 niños son víctimas de esta enfermedad.
El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es un virus que daña al sistema inmunitario y que interfiere con la capacidad de tu cuerpo para luchar contra infecciones y enfermedades. Se trata de una enfermedad de transmisión sexual que también se puede transmitir por el contacto con sangre infectada o por inyectarse drogas.
AUMENTA EL RIESGO DE EXCLUSIÓN SOCIAL
La encuesta “Positive Perspectives”, realizada por ViiV Healthcare y que pone de manifiesto que el estigma continúa siendo todavía una realidad en España para las personas que viven con VIH.
En esta misma encuesta por ejemplo, se daba a conocer que el 58% de los participantes por ejemplo se sienten incómodos cuando hablan de este tipo de enfermedad. Y además, el 50% ha afirmado que tienen miedo de contar que tienen VIH en sus entornos laborales ante el temor de que esto suponga la pérdida del trabajo.
Todas las personas sexualmente activas, se realicen una prueba del VIH, al menos una vez al año
Entre otros datos llamativos, el 46% de las personas con VIH se sienten incómodas al hablar con el personal sanitario sobre cómo prevenir la transmisión de la infección a sus parejas.
PREVENCIÓN Y SÍNTOMAS, LA CLAVE
Si se quiere conseguir lograr el objetivo de erradicar la enfermedad en el año 2030, e es muy importante saber prevenir y diagnosticar cuando se está sufriendo la enfermedad.
Entre sus principales síntomas, tal y como explican desdeMayo Clinic varían dependiendo de la etapa de infección:
Infección primaria. Fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular y articular, erupción, dolor de garganta, diarrea, pérdida de peso, tos o sudores nocturnos.
Infección clínica latente. Es posible que muchas personas no tengan ningún síntoma o infección durante este tiempo.
Infección por VIH sintomática. Pueden presentarse síntomas como fiebre, fatiga, diarrea, herpes, neumonía, candidiasis o ganglios linfáticos inflamados.
Evolución al SIDA. Cuando el acceso al tratamiento es insuficiente, el VIH acaba por transformarse en SIDA. “Cuando aparece el SIDA, existe un daño grave en el sistema inmunitario. Será más probable que se presenten enfermedades que normalmente no se manifiestan en personas con un sistema inmunitario sano”, explican desde Mayo Clinic.
PRUEBAS DE DIAGNOSTICO
Las pruebas de diagnóstico de enfermedades de transmisión sexual son esenciales para frenar su expansión. Existen diferentes formas de conocer si se tiene o no una ETS. Por un lado, las pruebas de anticuerpos, que necesitan un periodo de entre 23 y 90 días antes de conocer el resultado. Y por otro lado, PCR, que permite conocer si hay o no infección entre 10 y 33 días después de exponerse al virus.
En este sentido, desde ViiV Healthcare señalan que es muy importante insistir “en la necesidad de hacer extensiva y posible la prueba del VIH a toda la población, con atención especial a sectores más vulnerables”. Además, añaden “la necesidad de que todas las personas sexualmente activas, se realicen una prueba del VIH, al menos una vez al año”