Hay varios estudios científicos que han demostrado que tener una buena musculatura favorece el bienestar mental. Esta afirmación tiene mucho sentido porque para lograr una buena tasa de masa muscular, hay que llevar una vida sana basada en actividad física y una alimentación saludable que evite los procesados, los refinados y el azúcar. Sin embargo, hay veces que los elevados ritmos de vida de la rutina nos dejan poco margen para lograr nuestros objetivos y, por mucho ejercicio que hagamos, parece imposible que podamos definir nuestra musculatura.
Desde el centro de belleza Carmen Navarro tienen la solución a nuestro problema. Aunque saben que el ejercicio y sus beneficios son “insustituibles” para nuestra salud, nos hablan de las propiedades de la gimnasia pasiva para tonificar el cuerpo en todos aquellos casos en los que no se logran los resultados físicos esperados. Esta técnica se conoce como Wonder y es una tecnología que consigue activar el metabolismo mediante las contracciones musculares.
¿CÓMO TRABAJA WONDER?
Wonder utiliza emisiones electromagnéticas y eléctricas de forma combinada y focalizada para, mediante la neuroestimulación, producir miles de contracciones en glúteos, abdomen y piernas. Las ondas alcanzan las capas más profundas del músculo con el objetivo de provocar el desgaste muscular y lograr una alteración metabólica que resulte en un consumo calórico muy similar al que se logra con varias horas de entrenamiento en el gimnasio.
¿El resultado? Aumenta el volumen muscular, se pierde masa magra y las fibras musculares ganan calidad. Pero también existen otros beneficios:
- Se tonifican las zonas trabajadas.
- Hay una regeneración muscular, que deriva en un rejuvenecimiento generalizado.
- Fortalecimiento corporal.
- Mejora del flujo sanguíneo.
- Se reduce la celulitis y hay un mayor control sobre la grasa localizada.
Wonder logra producir hasta 52.000 contracciones musculares en una profundidad récord de 16 centímetros
Mientras el paciente está tumbado en la camilla, Wonder requiere que practique movimientos guiados para potenciar la acción del dispositivo y mejorar los resultados. Esta tecnología logra producir hasta 52.000 contracciones musculares en una profundidad récord de 16 centímetros, actuando a la vez en piernas, glúteos, abductores, abdomen, oblicuos y brazos. Las sesiones rondan los 25 minutos.
Este tratamiento también es muy eficaz también para recuperar el tono muscular que se va perdiendo con el paso del tiempo y que afecta especialmente a las mujeres en edades maduras. La pérdida de la musculatura es un proceso natural y gradual, pero, según Carmen Navarro, “gracias a Wonder ya podemos conseguir unos brazos tonificados y un abdomen marcado, independientemente de la edad y del sexo. Y todo gracias a la tecnología reservada, hasta ahora, al deporte de élite”.