Abusar de la exposición al sol entraña graves daños que dependerán de la duración de la exposición. Rocío Franco, R&D Technical Coordinator de Gisèle Denis y experta en dermocosmética, nos habla sobre los peligros de la exposición solar y nos da los mejores consejos para tratar los eritemas o quemaduras solares.
TIPOS DE RADIACIÓN SOLAR
-Radiación UV-A: entre el 30% y el 50% de los rayos UV-A llegan a niveles profundos de la dermis, y son los responsables del envejecimiento cutáneo y del melanoma.
-Radiación UV-B: son muy energéticos y son los responsables del eritema cutáneo. Penetran a nivel epidérmico y provocan el bronceado de la piel. Es responsable de alrededor del 75% de los efectos carcinógenos causados por la radiación solar
-La radiación visible (efecto luminoso): tiene la capacidad de producir manchas (hiperpigmentación) en nuestra piel y empeorar las ya existentes. La absorbemos en epidermis y dermis.
-La radiación inflarroja (efecto calorífico): penetran hasta la hipodermis, y provocan fotoenvejecimiento cutáneo. Favorece los efectos nocivos de UV-A y UV-B y aumenta la probabilidad de cáncer debido a su capacidad para originar modificaciones en el ADN celular.
¿QUÉ ES UN ERITEMA O QUEMADURA SOLAR?
El término eritema se emplea de forma profesional para designar el enrojecimiento de la piel que generalmente se produce por la acumulación de células del sistema inmunológico. Este enrojecimiento puede manifestarse de forma tópica, cuando afecta a una porción limitada del cuerpo, pero también puede ser generalizado.
El término eritema se emplea de forma profesional para designar el enrojecimiento de la piel que generalmente se produce por la acumulación de células del sistema inmunológico
Cuando se habla de eritema solar, el enrojecimiento se relaciona con la exposición excesiva al calor y los rayos solares. Este es uno de los tipos de eritemas más comunes en la población, derivando frecuentemente en quemaduras.
EFECTOS DE LA EXPOSICIÓN SOLAR
''Después de tomar el sol debemos cuidar nuestra piel, ya que los efectos de su radiación son perjudiciales tanto a corto como a largo plazo. El eritema o quemadura solar es la consecuencia más inmediata de la exposición solar sin la protección adecuada, pero no es la única'', indica Rocío Franco.
Los efectos del fotoenvejecimiento cutáneo a nivel facial son de aparición rápida como consecuencia de la exposición solar. Aparecen arrugas, descolgamiento facial, manchas y tono apagado.
Los efectos de la exposición al sol a nivel corporal se reflejan en sequedad cutánea y enrojecimiento, a corto plazo y flacidez cutánea, a medio plazo. Por ello es importante tratar la piel tras la exposición al sol, con productos que tengan alta capacidad hidratante y propiedades reparadoras, especialmente si nos hemos quemado.
CONSEJOS PARA TRATAR LA PIEL DEPUÉS DE ERITEMAS SOLARES U OTROS EFECTOS DAÑINOS DEL SOL
1. No es lo mismo un body milk que un after sun. Se recomienda la utilización de productos específicos para después del sol, que estén especialmente formulados para reparar la piel tras su exposición.
Cuando se habla de eritema solar, el enrojecimiento se relaciona con la exposición excesiva al calor y los rayos solares
2. Utilizar productos calmantes. A un producto para después del sol, debe exigírsele efecto calmante, que reduzca la irritación de la piel (enrojecimiento y dolor).
3. Buscar fórmulas con efecto refrescante. Usando este tipo de fórmulas, se bajará la temperatura y el nivel de inflamación de la piel.
4. Priorizar activos antiinflamatorios, como fitoesteroles, que ayudarán a suavizar las molestias del eritema.
5. La regeneración celular es clave. De esta forma se minimiza el daño que el sol ha producido en la piel, estimulando la síntesis de colágeno y elastina y recuperando la firmeza de la piel.
6. Los antioxidantes, fundamentales. El sol produce una importante cantidad de radicales libres provocando fotoenvejecimiento. Los antioxidantes permiten neutralizar el daño provocado por los radicales libres.
7. Evitar la depilación. Al menos durante unos días, ya que la piel estará muy sensible y el uso de cuchillas y/o cera puede empeorar la irritación.
8. Evitar la exfoliación, al menos hasta que el enrojecimiento y el dolor hayan desaparecido. Cuando se empiecen a eliminar las células muertas de la piel, se podrá realizar una exfoliación suave.
9. El cabello también sufre. Tras la exposición solar, el cabello también necesita un aporte extra de nutrición que restaure la fibra capilar y selle la cutícula.
10. No continuar con la exposición al sol. Usar ropa con protección UV, quedarse en la sombra e hidratarse. No olvidar nunca seguir usando el protector solar ajustado al fototipo cutáneo