Los tatuajes solían considerarse permanentes, pero gracias a los avances en la tecnología láser, los tatuajes pueden eliminarse de manera más segura y efectiva.
Sin embargo, aunque la tecnología ha mejorado, los resultados dependerán casi por completo de la persona que realiza el servicio.
Y es que,tal y como afirma Marie Leger, dermatóloga de la Academia Estadounidense de Dermatología, "para obtener los mejores resultados y reducir el riesgo de efectos secundarios graves, como cicatrices, quemaduras y otras heridas, es importante asegurarse de que la persona que lo atiende sea un médico extremadamente experto en el uso del láser y que tenga un conocimiento profundo de la piel" y añade que ''después de eso, también es importante cuidar adecuadamente la piel tratada entre sesiones, ya que tu piel necesita tiempo para sanar y eliminar la tinta''.
Los tatuajes solían considerarse permanentes, pero gracias a los avances en la tecnología láser, los tatuajes pueden eliminarse de manera más segura y efectiva
En este sentido, para cuidar la piel después de cada tratamiento, la doctora recomienda seguir los siguientes consejos.
1. Lava el área tratada dos veces al día con agua y un limpiador suave. Luego, usa un hisopo de algodón limpio para aplicar vaselina en el área. Esto ayudará a mantener la piel húmeda para que no se seque ni forme costras. Para prevenir la infección, cubre el área tratada con un apósito hasta que la piel sane.
2. Protege la piel tratada del sol. Dado que la piel tratada es más susceptible al daño solar, que puede provocar cambios de color en la piel, mantén el área tratada fuera de la exposición directa al sol. Cuando estés al aire libre, usa ropa protectora. Una vez que la piel tratada se haya curado, aplica un protector solar de amplio espectro con un FPS de 30 o más.
3. Evita tocar cualquier descamación, ampollas o costras que se formen. No revientes ninguna ampolla, ya que puede causar una infección.
4. Hay efectos secundarios que no son normales. Después de una sesión de eliminación de tatuajes con láser, puedes experimentar un poco de enrojecimiento, hinchazón y ampollas a medida que tu piel sana. Sin embargo, si notas signos de una infección, como aumento del enrojecimiento y dolor, hinchazón o pus, comunícate con tu dermatólogo.