La caída del cabello en el otoño es un problema que se produce cada año cuando los días de verano llegan a su fin. Esta pérdida es algo habitual y responde a las características de esta estación.
Y es que, en otoño, el cabello se encuentra dañado al haber sufrido las consecuencias del verano o, incluso, debido a factores medioambienteales, pero a la vez, el pelo está en fase de reposo y caída, llamada fase telógena, en la que se está preparando para una nueva fase de crecimiento de cabello nuevo o fase anágena. Estas pérdidas en principio no son preocupantes, pero sí se debe estar atento en aquellos casos en los que cambia la densidad de nuestro cabello.
En este sentido, para evitar que este problema estacional vaya más allá de la pérdida natural de cabello provocada por el otoño, Stop&Grow ofrece una serie de consejos para mejorar la densidad y la salud capilar.
1. Lavar el cabello asiduamente. Un cuero cabelludo limpio asimila mejor los tratamientos o soluciones que se apliquen para frenar la caída.
2. La alimentación. Una buena dieta siempre es la mejor defensa ante cualquier situación. En otoño para combatir esta 'muda' debemos aumentar la cantidad de alimentos que contienen vitamina B12 como las carnes rojas o lácteos; biotina, que se encuentra en alimentos de origen vegetal y animal, además de en las legumbres; ácido fólico, presente en verduras, frutos rojos y cítricos; o zinc, que está en los mariscos y pescados, carnes rojas magras, lentejas, quesos o en frutas como el plátano.
3. Evitar las planchas y secadores. El calor que desprenden estos productos incide en la salud del cabello y puede hacer que la caída sea más pronunciada. El pelo se seca y se vuelve más débil. Es el momento de exprimir al máximo las buenas temperaturas y optar por dejar secar la melena al aire libre.
4. Masajear el cuero cabelludo y peinar el cabello con delicadeza. En esta época en la que el cabello está más susceptible es conveniente cepillar el pelo suavemente para evitar que se caiga y realizar pequeños masajes en la zona para reactivar la circulación y despertar la actividad de los folículos.
5. Evita los recogidos tirantes. Es recomendable llevar el cabello suelto o recogerlo de forma suave. La tirantez provoca que el pelo pueda quebrarse y finalmente caerse.