Ya lo dice el refrán “la primavera la sangre altera” y nunca mejor dicho. Esta estación del año se caracteriza por ser un tanto peculiar, igual un día hace sol y al siguiente llueve y hace viento. Nuestra piel percibe todas estas variaciones e igual que nosotros, tiene que adaptarse a ellas. Por eso, es tan importante cuidarla.
Nuevas estaciones y nuevas rutinas de belleza. Estos son los pasos que deberías seguir para mantener tu piel hidratada y sana de cara al verano.
Exfoliación.Exfoliar la cara de una a dos veces por semana ayudará a mantener la piel limpia y libre de impurezas.
Limpieza. Al igual que en el resto de estaciones del año, limpiarse la cara diariamente para conservar la hidratación de la piel.
Hidratación. Es importante que a la hora de escoger las cremas y sérums con los que tratar la piel en primavera, se tenga en cuenta la textura de la misma. Lo mejor es escoger una crema con textura ligera con activos humectantes como la glicerina, el ácido hialurónico, distintos extractos vegetales. Además, es importante que la crema también contenga antioxidantes para proteger a la piel de los efectos de la contaminación, sobre todo en la gran ciudad.
Protección solar. Aunque es importante durante todo el año, con el aumento de las temperaturas más aún. Salir a las terrazas, dar paseos, viajar a la playa, en esta época del año, la piel esta mucho más expuesta a los rayos del sol, por eso es conveniente usar cremas fotoprotectoras, para proteger y preparar a la piel de quemaduras.
Otro aspecto fundamental para mantener nuestra piel sana e hidratada es mantener una buena alimentación. El consumo de frutas y verduras aporta al organismo vitaminas, antioxidantes y minerales. Consumiendo entre 2 y 3 piezas de verdura al día ayudamos a prevernir la aparición de arrugas en la piel. El chocolate negro, gracias a la gran cantidad de flavonoides que contiene ayuda a mantener hidratada la piel. Si por el contrario, tu problema es el acné, entonces las frutas como el melón o el mango te ayudarán a reducir la aparición de granos y espinillas. Además, es importante no abusar de alimentos con un alto contenido en azúcar como los dulces.
DEPORTE PARA LA PIEL
Ha quedado demostrado que hacer ejercicio físico nos aporta múltiples beneficios, nos mantiene relajados, nos aporta energía, fortalece el sistema inmune y también ayuda a mantener la piel más hidratada y perfecta. Por un lado, el deporte estimula la circulación sanguínea y esto provoca que pueda recibir más nutrientes y oxígeno y con ello, mejoramos el color de la piel y le damos más brillo. Además, al hacer deporte sudamos, sobre todo en las estaciones más calurosas del año, lo cual es beneficioso para la salud ya que ayuda a eliminar la suciedad de la piel y prevenir el acné y puntos negros. A nivel más corporal, hacer deporte ayuda a reducir la aparición de celulitis y estrias y a mejorar la flacidez de la piel.