Para desinfectar las manos, siempre que no sea posible recurrir a un lavado con agua y jabón, porque por ejemplo nos encontremos en la calle o en algún establecimiento, se debe recurrir a los geles hidroalcohólicos. Estos deben tener una composición de alcohol de al menos el 70%.
En este sentido, la doctora Mildred Sánchez, dermatóloga del Instituto de Dermatología Integral (IDEI), destaca que ''el formato gel es más efectivo, ya que permite que nos podamos distribuir de manera más adecuada el gel en toda la superficie de las manos, incluyendo entre los dedos''.
Por otro lado, afirma, ''el formato bruma, aunque el reclamo del olor a perfume pueda ser atractivo, es menos recomendable, ya que algunas partes de las manos se pueden dejar sin desinfectar y darnos una sensación de falsa seguridad si simplemente nos las rociamos y las dejamos que se sequen al aire. Además, los perfumes pueden acabar convirtiéndose en unos agentes irritativos que harían más mal que bien a la salud de la piel''.
El formato gel es más efectivo, ya que permite que nos podamos distribuir de manera más adecuada el gel en toda la superficie de las manos
Sin embargo, el uso continuado de este tipo de productos puede afectar a la piel, provocando que se irrite y reseque. En las personas con piel sensible o patologías previas pueden aparecer, incluso, grietas y heridas. ¿El motivo? Que este tipo de productos agreden el manto hidrolipídico natural de la piel, que es la primera barrera natural que tiene la piel frente a las agresiones externas.
Entonces, ¿qué se puede hacer para que estos productos no dañen tanto la piel? Según la doctora, ''hay que hidratar la piel de forma continuada para evitar que el manto hidrolipídico que nos protege acabe dañado y, por panto, apareciendo efectos secundarios a su uso (irritaciones, eccemas, sequedad extrema, heridas e, incluso, el desarrollo de nuevas patologías, como puede ser la dermatitis de contacto)''.
Por ello, es recomendable utilizar jabones syndet /sin detergentes para el lavado de manos cuando se pueda y dejar el uso de gel hidroalcohólico para cuando no sea posible el lavado.
El uso continuado de este tipo de productos puede afectar a la piel, provocando que se irrite y reseque
También ''podría ser recomendable aplicar crema hidratante después de aplicación de gel hidroalcohólico y por la noche aplicar cremas o mascarillas de manos altamente hidratantes o reparadoras para contrarrestar'', subraya la especialista. Eso sí, añade, ''en el caso de que aparezcan irritaciones o heridas que no curan en días tras llevar a cabo estos consejos, hay que acudir al dermatólogo para que paute un tratamiento adecuado''.
En cuanto a la utilización de este tipo de productos durante la exposición solar, Mildred Sánchez destaca que ''podría provocar quemaduras en la zona en la que se ha utilizado. Es más recomendable recurrir al lavado de manos y, por supuesto, nunca olvidar utilizar la fotoprotección solar, que en estos momentos en los que el índice de radiación ultravioleta es más alto y, pasamos más horas al sol, debería ser con un factor de protección de 50''.