Precauciones para tomar el sol de manera saludable

Carmen Navarro nos da unas pautas a seguir para que nuestra piel no sufra las terribles consecuencias de los rayos solares.

Protegerse del sol siempre es importante, pero en verano todavía más ya que los rayos ultravioleta son más dañinos
Protegerse del sol siempre es importante, pero en verano todavía más ya que los rayos ultravioleta son más dañinos
Estetic
24 junio 2018 | 22:00 h

Protegerse del sol siempre es importante, pero en verano todavía más ya que los rayos ultravioleta son más dañinos. Por ello, ahora que ya ha llegado el verano y vamos a estar expuestos al sol más que de costumbre, Carmen Navarro nos da una serie de consejos para que nuestra piel no sufra las terribles consecuencias de los rayos solares.

1. UN BUEN PEELING OBRA MILAGROS EN TU PIEL. Para prevenir mejor que lamentar, lo ideal para afrontar los primeros rayos solares es realizarse un peeling integral, de pies a cabeza. Existen exfoliantes, con aceites esenciales que no solo nos ayudan a arrastrar las células muertas y renuevan nuestra epidermis, sino que también dejan la piel hidratada y nutrida.

2. UTILIZA LAS LOCIONES ''AMIGAS''. Son lociones formuladas con precursores del bronceado, que le aportan a la piel principios activos que la ayudan a elevar sus defensas frente a los daños solares. 

3. RECURRE A LA NUTRICOSMÉTICA. Si además tu fototipo de piel es bajo, son muy recomendables las cápsulas de nutricosmética solar, cargadas de vitaminas y oligoelementos, que le aportan a los melanocitos (las células dérmicas encargadas de activarla melanina, el pigmento que nos pone morenas) herramientas para defendernos frente a los rayos UV. Cápsulas cargadas de betacarotenos que ayudan a mantener el bronceado como el Concentré Éclat & Anti-Âge Express de LPG.

4. OJO CON USAR FACTORES DE PROTECCIÓN BAJOS especialmente durante los primeros baños solares intensos. No debe ser inferior a 30, aunque seas de los afortunados que nunca sufres quemaduras solares. Recuerda que los daños solares no son siempre visibles con una piel enrojecida, pero pueden dañar el ADN de las células y las fibras del tejido conectivo, como el colágeno y elastina o alterar la producción de melanina. La factura se paga después, cuando ya ni recordamos los cálidos días de verano. 

5. PROTÉGETE CON UÑAS Y DIENTES. Sombreros de ala ancha, viseras poderosas y gafas de sol, así como las prendas que incorporan factor de protección solar son también buenos recursos para evitar los eritemas solares. 

6. SÚMATE AL RICO Y VITAMINADO ZUMO DE FRUTAS. Es muy recomendable ingerir, a través de la alimentación (zumos, por ejemplo), vitaminas A, C, E y F, un cuarteto que eleva las defensas de la piel, combate los radicales libres y ayuda a prolongar el bronceado.

7. UN TRATAMIENTO DE CHOQUE EN CABINA te ayudará a preparar la piel. Es el caso de Sea Creation, un tratamiento que descarga energía en la piel con el fin de estimular el nacimiento de nuevas células, los queratinocitos. No solo aumenta su número y rejuvenece sus características fisiológicas, sino que acelera su ascenso a las capas más superficiales de la piel. De este modo se renueva y regenera la piel y aumenta la función barrera de la misma. Lo consigue gracias a los principios activos del termófilus, un alga que crece en condiciones extremas y que, por tanto, tiene la capacidad inteligente de proteger las células (antioxidativa, termoactiva y energética). 

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