La socialmente conocida como dermatitis atópica es una de las principales causas de problemas dermatológicos entre los más pequeños. Es padecida por la mayoría en algún momento de su infancia y se considera como una de las enfermedades más comunes en los primeros años de vida.
Pero, ¿qué es la dermatitis atópica? Según los expertos de Freshly Kids, es una enfermedad crónica y muchas veces hereditaria que se desarrolla en niños y bebés de entre los 3 meses y 5 años de vida, aunque la mayoría de los casos tienden a desaparecer durante los dos primeros años.
Los niños afectados suelen tener un antecedente genético alérgico que tiende a manifestarse con asma, conjuntivitis alérgica o a nivel digestivo. También se puede dar el caso de que aparezca por diferentes factores alérgenos, alimenticios, medioambientales o por algunos tejidos o productos como la cosmética convencional con los que el niño esté en contacto en su día a día.
Asimismo, la piel atópica se manifiesta con una dermis extremadamente seca y rugosa e incluso con pequeñas escamas. Es un problema muy visible en la piel ya que en esta suelen aparecen placas rojas y secas en las zonas del rostro, los pliegues y en las extremidades. Durante estas fases, los más pequeños sufren picores constantes, teniendo un impacto importante en su día a día, ya que en ocasiones llega al punto de provocar problemas de insomnio.
La socialmente conocida como dermatitis atópica es una de las principales causas de problemas dermatológicos entre los más pequeños
En este sentido,como la dermatitis atópica se debe principalmente a un factor genético, no se puede prevenir, pero sí se pueden llevar a cabo prevenciones cotidianas. Por ello, desde Freshly Kids nos dan algunos consejos para aplicarlos en el día a día con los más pequeños.
1. Cuidar los tejidos. Se debe evitar el uso de sintéticos o lanas, ya que tienden a provocar reacciones alérgicas en la piel. Utilizar prendas de algodón tanto en la ropa como en las toallas les ayudará a mejorar la transpiración, haciendo que la piel no sufra con cambios de temperatura o frotados al secarlos en los baños.
2. Utilizar productos naturales. Cuidar la piel en la rutina de baño es esencial y hay que hacerlo con geles y champús aptos para pieles atópicas. Sin jabón y con ingredientes naturales, sin perfumes, compatibles con este tipo de enfermedades como los productos de baño de Freshly Kids. Formulados con ingredientes 100% naturales y aptos para pieles sensibles.
3. Hidratar. Las pieles atópicas tienen a deshidratarse con más facilidad y necesitan mayor hidratación. Sobre todo, después de la hora del baño, que es cuando su piel está más sensible. Lo ideal es que se aplique diariamente una crema corporal apta para pieles atópicas, que ayude a calmar la piel evitando irritaciones y eccemas, como la Crema corporal Sweet Apple de Freshly Kids.
4. Crear ambientes relajados. Uno de los mayores desencadenantes de la dermatitis atópica es el estrés, por lo que hay que crear un ambiente tranquilo y relajado en casa para que el niño se sienta a gusto y sufra menos picores. Aún así, es aconsejable utilizar productos que tiendan a aliviarles el picor, como la línea de productos de Freshly Kids. Siguiendo estos consejos, los más pequeños sufrirán menos dolencias relacionadas con esta enfermedad.