¿Has notado que estos días se te cae más el cabello y no sabes por qué? Si la respuesta que te han dado es que se debe al cambio de estación, ¡es un gran mito! Que en otoño caigan las hojas de los árboles y la naturaleza inicie un proceso de renovación no quiere decir que en nuestro cuerpo ocurra lo mismo, pues a diario eliminamos de nuestro organismo células muertas y cabello. Pero, entonces, ¿a qué se debe este aumento de pelos en el peine o en la almohada?
Sí que es verdad que la época de verano debilita el cabello debido al sol y la playa, ya que es poroso y estos factores externos le afectan y se puede notar una vez acabada esta temporada. Por tanto, ''la caída del pelo no se debe a la llegada del otoño en sí misma, sino al hecho de que la estructura capilar ha sufrido durante tres meses intensos'', explican los expertos de Insight, marca ECO de cuidado capilar, facial y corporal. Por ejemplo, la exposición al sol puede causar deshidratación y nos hacemos más recogidos en el cabello para evitar pasar calor. Del mismo modo, aplicamos más productos para proteger esta zona del cuerpo, como los solares capilares.
''Aunque podamos pensar que el agua del mar o la piscina ayuda a hidratar, así como no secarnos el cabello tras la ducha, esto se convierte en su principal enemigo, y los efectos se notan al llegar el otoño'', puntualizan desde la firma. Pese a que parece una afirmación contradictoria, tiene una respuesta simple: el agua también ocupa lugar en la estructura capilar, por lo que el exceso que se produce en verano crea una mayor rotura. Es más, ''el agua sirve para limpiar el cabello, pero para hidratarlo se necesitan otro tipo de productos con esa función específica'', añaden los expertos.
La época de verano debilita el cabello debido al sol y la playa, ya que es poroso y estos factores externos le afectan y se puede notar una vez acabada esta temporada
Otro factor que afecta al aumento de cabellos que encontramos en nuestra almohada o en el suelo es el estrés. De hecho, con la Covid-19, el ''trauma psicológico'' que genera al tratarse de una situación excepcional y fuera de lo común puede causar más situaciones de nerviosismo que, sin duda, afectan a nuestro organismo. Lo mismo ocurre con la vuelta al trabajo y al colegio, que propician este estado.
Por si no había suficientes enemigos para el cabello, el exceso de sebo también puede derivar en una mayor caída. Las glándulas sebáceas y sudoríparas que se encuentran en la piel del cuero cabelludo son las encargadas de producir esta secreción para generar una barrera protectora que lucha contra la deshidratación y evita que se reseque. Una mala producción de estas glándulas que genere un exceso de sebo puede crear una falta de oxigenación y, por tanto, la afectación a los folículos pilosos, lo que acentúa la pérdida.
''Si tocamos de forma constante el cabello o abusamos de recogidos como colas o moños, puede producirse este efecto, además de la suciedad que llevan las manos hasta esta zona y que contribuyen a un desequilibrio'', especifican los expertos de Insight.
LA SOLUCIÓN: UN TRATAMIENTO ESPECÍFICO LOSS CONTROL
Proteger nuestro cabello es importante, pero también el planeta. ¿Pero cómo lo podemos hacer para evitar la caída con productos capilares y a la vez de forma sostenible? Insight cuenta con la gama Loss Control para combatir este problema capilar con toda su esencia eco-consciente, que garantizan un resultado profesional sin renunciar a los estándares ecológicos más exigentes.
Las glándulas sebáceas y sudoríparas que se encuentran en la piel del cuero cabelludo son las encargadas de producir esta secreción
El tratamiento Loss Control, formado por un champú y una loción, está formulado con extracto biológico de castaño de Indias y un fitocomplejo fortalecedor a base de extractos de guaraná y equinácea. Como todos los productos de Insight y a diferencia de otras marcas, el ingrediente principal es el agua ozonizada, lo que proporciona una higienización profunda y 100% ecológica, y con un poder antibacteriano y antioxidante superior al del cloro.
Es importante tomarnos nuestro tiempo y aplicar el tratamiento completo, ya que es la combinación de ambos productos lo que crea la situación idónea en el cabello para recibir todos sus beneficios. Primero aplicamos el champú fortalecedor, que refuerza el bulbo capilar y limpia el sebo que puede obstaculizar la entrada de los principios activos. Se debe lavar la melena con un masaje suave durante 5 minutos para que penetre y, después, se aclara cuidadosamente y se retira el exceso de agua.
Una vez preparado, se debe aplicar la loción fortalecedora, que tiene como misión favorecer la microcirculación del cuero cabelludo y así evitar la caída. Se debe distribuir a lo largo de toda la cabeza cada 2 cm, con ayuda de la pipeta y presionando con un dedo en la zona para facilitar la entrada. Al final, se masajea la cabeza con ambas manos extendidas de forma suave.