Seguro que todos conocemos a alguien con pecas, esas marquitas pequeñas e inofensivas que aparecen en la piel. Pero, ¿por qué unas personas las tienen y otras no? ¿Cuáles son las causas de su aparición?
Las pecas aparecen cuando la melanina, el pigmento que da color a la piel, se acumula debajo de esta. Entre las causas más frecuentes de su desarrollo se encuentran la exposición solar y la genética.
En lo que se refiere a la exposición solar, las células de la piel producen melanina adicional para proteger la piel del daño solar y, por esta razón, las pecas tienden a aparecer después de la exposición al sol. Estas pueden aparecer sobre un área grande de la piel y pueden reaparecer o volverse más oscuras en los meses de verano. Por otra parte, las pecas a menudo se desvanecen o desaparecen en los meses de invierno, cuando las nuevas células de la piel reemplazan a las células viejas.
Las pecas aparecen cuando la melanina, el pigmento que da color a la piel, se acumula debajo de esta
Por otro lado, la genética también desempeña un papel importante en quien tiene más probabilidades de desarrollar pecas según el tipo de melanina que produce su cuerpo. Y es que, el cuerpo puede producir dos tipos de melanina llamadas feomelanina y eumelanina. La eumelanina protege la piel de los rayos UV, pero la feomelanina no lo hace.
Por ejemplo, las personas con cabello rojo, rubio o castaño claro y que tienen la piel y los ojos de color claro producen feomelanina, por lo que son más propensas a desarrollar pecas. En cambio, las personas con cabello, ojos y piel oscuros producen eumelanina, por lo que tienen menos probabilidades de desarrollar pecas.