Hay quienes consideran que el deporte es la base de la felicidad. Una manera de evadirse de la realidad y por unas horas enfocarse únicamente en disfrutar mientras se practica el deporte que uno quiere.
Ahora, un estudio ha demostrado que cuanto más músculo tenemos más felices somos, es decir, cuanto mejor nos vemos físicamente más contentos. Pero... ¿cómo desarrollar la musculatura? ¿Se precisan para ello largas horas levantando pesas en el gimnasio?
La respuesta es muy sencilla. Por muchas horas que te pases en el gimnasio eso no va a significar que tengas más musculatura. Todo influye, pero no todo son pesas.
Gracias a la tecnología ahora puedes ser capaz de desarrollar músculos sin necesidad de ir al gimnasio. Desde Wonder Medical han creado el concepto Musculación Estética y tal y como afirma su creador “quiénes nos dedicamos a la creación de músculo siempre supimos que la depresión se reduce apenas comienzas a desarrollar tu cuerpo y aumentar la fuerza. Lo interpretamos como un incremento de autoconfianza, que es imprescindible no solo para los deportistas de elite, sino para cualquier persona”.
CON 20 MINUTOS, SUFICIENTE
La famosa autora Gretchen Reynolds, de las más leídas del New York Times, publicó un libro titulado “Los primeros 20 minutos” en el que plantea que la clave para obtener el mayor nivel de felicidad y beneficios para la salud no está en convertirse en atleta profesional. Por el contrario, se necesitan únicamente veinte minutos para obtener la mayoría de estos beneficios.
¿Existe realmente un vínculo directo entre el ejercicio y la felicidad? Se ha demostrado que el ejercicio mejora los patrones de sueño, reduce la ansiedad y es responsable de la creación de nuevas células cerebrales en la parte del cerebro responsable del aprendizaje y la memoria.
Para quiénes no tienen tiempo y buscan un ámbito privado y seguro, la tecnología de Wonder Medical ofrece una combinación única de emisiones electromagnéticas y neuromusculares que trabajan simultáneamente sobre los seis principales grupos musculares.
Tanto el trabajo muscular como la felicidad conducen a una mayor producción de anticuerpos, la proteína especial producida por el sistema inmunitario y encargada de destruir cualquier antígeno, ya sean bacterias, virus o cualquier otro invasor indeseado, y se ha demostrado que el ejercicio físico es capaz de aumentarlo en un 300%.