Medicina y cirugía estética y sol: ¿son compatibles?

El sol resulta dañino para la piel, lo que puede generar dudas a la hora de someterse a tratamientos estéticos en estas fechas.

Exposición solar (Foto. Estetic)
Exposición solar (Foto. Estetic)

Las temperaturas suben y el verano ya está aquí. Sabemos que el sol resulta dañino para la piel, lo que puede generar dudas a la hora de someterse a tratamientos de medicina y cirugía estética en estas fechas.

La doctora Gema Pérez Sevilla, cirujana maxilofacial y experta en medicina estética facial, resuelve todas las dudas acerca de tomar el sol antes y después de un tratamiento.

TRATAMIENTOS QUE NO SE ACONSEJAN REALIZAR CON LA SUBIDA DE TEMPERATURAS

Todos los que implican recambio de piel, por ejemplo, láser CO2 Resurfacing, láser pigmentario y peelings profundos. Todo ellos dejan la piel muy expuesta y, en contacto con el sol, aparecerían manchas. Tampoco es aconsejable realizar tratamientos que impliquen cicatrices muy expuestas en el rostro, como resecciones de fibromas o de lesiones cutáneas superficiales.

TRATAMIENTOS QUE SÍ SE PUEDEN REALIZAR, PERO CON PRECAUCIONES

En general, es posible realizar cirugías y tratamientos de medicina estética en los meses de verano siempre que se tengan en cuenta dos premisas:

No es aconsejable realizar tratamientos que impliquen cicatrices muy expuestas en el rostro

-No se puede tomar el sol ni someterse a temperaturas altas el día del tratamiento/cirugía. Cualquier procedimiento implica una inflamación y las altas temperaturas favorecen la inflamación, con lo que estaríamos dilatando el tiempo de recuperación.

-Si el procedimiento provoca un hematoma, este no se debe exponer al sol, para evitar que quede marca.

CIRUGÍAS Y SOL

Tras una cirugía facial no se debe tomar el sol en los 15 primeros días. Pasado ese tiempo, aunque lo aconsejable sería evitarlo (al menos entre 3-6 meses), se podrían realizar exposiciones con protección muy alta, reaplicando cada 2 horas y optando por utilizar protección en stick, que se pega más a la piel, es más resistente al sudor y más fácil de aplicar.

Dependiendo de la cirugía, hay que extremar más las precauciones, por ejemplo, dos zonas muy expuestas al sol serían la nariz y los labios. Después de una rinoplastia, la piel queda muy traumatizada, y además se trata de una piel más fina, por lo que se debería evitar o utilizar protección solar muy alta, junto a protección física (gorras, sombreros de ala ancha…). Tras el láser lip lift queda una pequeña cicatriz debajo de la nariz, que habría que proteger completamente.  

Otras cirugías menos traumáticas son, por ejemplo, una blefaroplastia inferior. Si no se ha usado el láser y no hay cicatriz externa, se podría tomar el sol pasada una semana, siempre con protección.

Dependiendo de la cirugía, hay que extremar más las precauciones, por ejemplo, dos zonas muy expuestas al sol serían la nariz y los labios

En el caso del lifting, las cicatrices quedan ocultas detrás de las orejas, pero en una exposición en la playa, no hay que confiarse y aconsejamos protegerlas con protección solar y usando un pañuelo a modo de diadema para cubrirlas perfectamente.

 TRATAMIENTOS ESTÉTICOS Y SOL

-Bótox: no se puede tomar el sol el primer día, después, salvo que salgan hematomas, con protección, no hay problema. Si hay hematomas, hay que evitar tomarlo o cubrirlos completamente.

-Rellenos con ácido hialurónico: hay que tener más cuidado porque es habitual que haya inflamación durante los 3-4 primeros días (en el bótox solo suele haber las primeras horas), y también hay más riesgo de que salgan moratones. No se aconseja exponerse al sol hasta pasados 3-4 días para evitar que la temperatura de la piel suba, activando la inflamación. A partir del 4º día se podrían hacer exposiciones intermitentes, evitando que suba la temperatura de la piel.

-Mesoterapia facial: no requiere cuidados específicos, pero si salen moratones, se recomienda usar cremas que ayuden a reabsorberlos, y, por supuesto, protección solar alta.

-Tratamientos en el contorno de los ojos: hay que proteger muy bien esa piel después porque es más fina y sensible. Además de usar protección solar específica, se aconsejan gafas de sol grandes que cubran toda la zona.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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