¿Lavarse el pelo a diario? ¿Utilizar champú anticaspa sin tenerla? ¿Frotar el cabello con la toalla al salir de la ducha? Muchas son las dudas y mitos transmitidos generación tras generación sobre el cuidado del cabello. Para evitar que se sigan cometiendo los mismos errores, los doctores de Insparya han respondido a algunas de las frases más escuchadas que, en realidad, pueden arruinar tu salud capilar.
1. Lavarse el pelo dos veces por semana. Por mucho que la sabiduría popular nos haya dicho durante siglos lo contrario, es el error más común. Porque, aunque no se pueda dar una respuesta categórica sobre la frecuencia de lavado ya que siempre dependerá del tipo de cabello y las necesidades del mismo, lo cierto es que lo realmente perjudicial es mantener la suciedad en nuestro cabello durante días. La limpieza es un punto fundamental para la salud de nuestro cabello, por ello los profesionales desaconsejan totalmente las modas o afirmaciones que promueven tanto el no lavado del pelo.
2. Utilizar un champú anticaspa como prevención. El doctor Roberto Castro de Insparya señala que ''no se deben utilizar los champús anticaspa de forma preventiva. Es un grave error. Únicamente utilizaremos este tipo de tratamiento cuando aparezca de verdad un problema de descamación, y siempre teniendo en cuenta que se aplicará durante un periodo de tiempo determinado''.
La sabiduría popular siempre ha recomendado dejar secar el pelo al aire para evitar utilizar aparatos de calor que estropeen el cabello
3. Utilizar los ingredientes naturales del champú como tratamiento. El propio sentido común en algunas ocasiones nos falla. Hay quienes erróneamente creen que utilizando ciertos ingredientes naturales de su champú habitual producirán un bienestar extra a la salud de su cabello, pero, todo lo contrario. El doctor Pastor Espinoza ha aclarado que ''es importante señalar que los ingredientes activos de un champú están a concentraciones adecuadas, utilizados de la forma correcta y en combinación con otros componentes que lo hacen efectivo en el tratamiento de una patología o del simple cuidado diario del cabello. No debemos utilizar estos componentes de otro modo porque podrían resultar perjudiciales''.
4. Aclarar el cabello con vinagre aporta más brillo. Es uno de los trucos más utilizados pero la realidad es que el vinagre no debe utilizarse para aportar más brillo al cabello. Existen en el mercado diferentes tipos de champús, mascarillas y tratamientos que pueden aportar un plus sin necesidad de recurrir a opciones alternativas.
5. Secar el pelo al aire en verano. La sabiduría popular siempre ha recomendado dejar secar el pelo al aire para evitar utilizar aparatos de calor que estropeen el cabello, pero la realidad es que dejar el pelo húmedo es un mal mayor. Al estar húmedo, el pelo pierde toda su fuerza y resistencia, lo que lo hace más propenso a fracturarse o a sufrir de puntas abiertas.
6. Rasurarse el pelo hace que salga con más fuerza. Esto es uno de los mitos más repetidos por la sabiduría popular. Lo que realmente ocurre es que el diámetro del pelo es más grueso cuando más cerca del cuero cabelludo se encuentra, así como en las puntas su diámetro se reduce. Por este motivo, al rasurarse se produce un efecto óptico que da la sensación de mayor densidad.