Este domingo se ha celebrado el Día Mundial del Cáncer de Ovario, una enfermedad que se diagnostica anualmente a casi un cuarto de millón de mujeres en todo el mundo. La patología además de las dificultades físicas y psicológicas que conlleva, también desencadena como una vivencia negativa la “pérdida de la feminidad” que trae consigo la caída del cabello.
Y es que, en la búsqueda de la normalización, la imagen adquiere un importante protagonismo por lo que, llegado el momento, la mayoría de las pacientes optan por ponerse en manos de profesionales de la estética capilar para recuperar su autoestima y recopilar las fuerzas necesarias para superar su enfermedad.
“Desde el mismo momento en el que a una mujer se le diagnostica cáncer hasta que empieza su tratamiento de quimioterapia, apenas tiene tiempo de decidir qué hacer con su imagen”, comenta Alberto Jarillo, director general de Natural Hair Center. “La mayor parte eligen la peluca para pasar inadvertidas y que nadie sepa que están atravesando por una situación así”.
Según explica Jarillo, antes de empezar a recibir quimioterapia, lo primero que debería hacer una mujer diagnosticada de cáncer es acudir a uno de estos centros de estética especializada donde los profesionales puedan antes de que se caiga el pelo, examinar su textura, grosor, color y estilo. De esta manera, buscarán el cabello natural que más se asemeje al de la paciente consiguiendo un efecto más natural en la peluca.
“Es mejor decidirse por una peluca de pelo natural que sintética. Su calidad, textura y fácil manejo marcan la diferencia con las sintéticas. Son muy resistentes, pueden ser lavadas y teñidas, permitiendo incluso cambiar de look sin miedo a dañarlas”, aclara el especialista, al mismo tiempo que remite a las pacientes a la infografía con las recomendaciones pertinentes sobre su colocación:
Porque tú eres lo más importante… Estetic.es
El cáncer de ovario es diagnosticado anualmente a casi un cuarto de millón de mujeres en todo el mundo
Y es que, en la búsqueda de la normalización, la imagen adquiere un importante protagonismo por lo que, llegado el momento, la mayoría de las pacientes optan por ponerse en manos de profesionales de la estética capilar para recuperar su autoestima y recopilar las fuerzas necesarias para superar su enfermedad.
“Desde el mismo momento en el que a una mujer se le diagnostica cáncer hasta que empieza su tratamiento de quimioterapia, apenas tiene tiempo de decidir qué hacer con su imagen”, comenta Alberto Jarillo, director general de Natural Hair Center. “La mayor parte eligen la peluca para pasar inadvertidas y que nadie sepa que están atravesando por una situación así”.
Según explica Jarillo, antes de empezar a recibir quimioterapia, lo primero que debería hacer una mujer diagnosticada de cáncer es acudir a uno de estos centros de estética especializada donde los profesionales puedan antes de que se caiga el pelo, examinar su textura, grosor, color y estilo. De esta manera, buscarán el cabello natural que más se asemeje al de la paciente consiguiendo un efecto más natural en la peluca.
“Es mejor decidirse por una peluca de pelo natural que sintética. Su calidad, textura y fácil manejo marcan la diferencia con las sintéticas. Son muy resistentes, pueden ser lavadas y teñidas, permitiendo incluso cambiar de look sin miedo a dañarlas”, aclara el especialista, al mismo tiempo que remite a las pacientes a la infografía con las recomendaciones pertinentes sobre su colocación:
Porque tú eres lo más importante… Estetic.es