Después de la pandemia, los ejercicios aeróbicos han cobrado especial relevancia, especialmente en aquellas personas con un tiempo muy limitado que buscan aumentar su movilidad con ejercicios de bajo impacto. Este tipo de actividad se puede llevar a cabo desde la comodidad del hogar, o bien, acudir a centros especializados.
El Pilates de colchoneta una de las disciplinas más practicadas actualmente, entorno a 500 millones de personas son apasionadas de este ejercicio en todo el mundo. Y las celebritiesson grandes defensoras del Pilates. Tanto es así, que una de las influencers más reconocidas de España, Paula Gonu (@paulagonu), es partidaria de este deporte y ella misma lo practica.
Ayuda a perder peso y a tonificar los músculos, mientras enseña disciplina y relajación
Entre algunos de sus beneficios podemos destacar su papel como activador del metabolismo, esto se debe a su función reguladora del gasto energético que, aumenta la quema de calorías a través de la sudoración.
De igual manera, es muy oportuno para tonificar el cuerpo de manera equilibrada entre en tren superior e inferior.
Con constancia, el Pilates se pude convertir en el mejor aliado para mejorar la postura, así como la flexibilidad sin el riesgo de lesionarnos. Además, es muy beneficios para aquellos que busquen disminuir sus niveles de estrés, gracias al esfuerzo de respiración y concentración que esta disciplina implica.
POSTURAS RECOMENDADAS
ROLL UP
Este ejercicio para principiantes se traduce como “rodar hacia delante” y tiene como objetivo aumentar la estabilidad. Consiste en rodar hacia adelante mientras mantenemos una postura de decúbito supino. Para ello, tenemos que sentarnos en el suelo, con las piernas estiradas. Hay que flexionar el tronco hacia delante mientras los brazos y piernas están estirados. Después, hay que descender la lumbar hasta volver a la posición inicial.
Con ocho repeticiones podemos mejorar la movilidad lumbar, los abdominales y la flexibilidad.
LEG CIRCLE
Como su nombre indica, círculos con una pierna. Para este ejercicio hay que tumbarse boca arriba y elevar una pierna en 90 grados. Hay que mover la pierna, mientras está estirada, en círculos y con la espalda apoyada en el suelo. Los brazos deben estar estirados y apoyados en el suelo.
Es recomendable realizar de seis a ocho vueltas y cambiar de sentido. Así, se trabaja la estabilidad del tronco y de la cadera.
LA “V”
Una forma de fortalecer lumbares es con la “V”, consiste en sentarse en el suelo y estirar simultáneamente piernas y brazos hasta formar un ángulo de 45 grados. Después, hay que levantar el tronco para poner los brazos en una posición paralela a las piernas hasta formar una figura de “V” con el cuerpo.
Mantener está posición hasta 15 segundos y realizar seis repeticiones es la mejor manera de mantener la constancia.
BIRD DOG
Es probable que cuando pensemos en Pilates se nos venga a la cabeza la imagen de esta postura. Una de las más clásicas que trabaja los músculos centrales y la coordinación, dos aspectos imprescindibles en esta disciplina.
Hay que colocar las manos y rodillas en el suelo mientras mantenemos una posición a cuatro patas. Después, hay que elevar un brazo y la pierna contraria de manera paralela al suelo. La columna tiene que permanecer recta mientras hombro y cadera se movilizan.
Para aprovechar todos sus beneficios es preciso que se mantenga la postura, al menos durante 30 segundos y en repeticiones de ocho o diez que vayan alternando de cada lado.
LA PIRÁMIDE
Otro clásico del Pilates es la Pirámide, consiste en mantener una postura de cuadrupedia elevada. Hay que colocar la planta de los pies y manos en el suelo, con la pelvis elevada y extremidades estiradas. Mientras, se debe inspirar para volver a la posición inicial: de pie.
Diez repeticiones en cada sesión pueden proporcionar mejoras en la musculatura de la espalda y de los hombros, así como mejorar la elasticidad general.
CRUNCHLESS OBLIQUES
Para esta técnica hay que colocarse en el suelo, de rodillas. Mientras apoyamos una rodilla, la otra pierna debe estar estirada, de forma que tendremos una posición inclinada que, hay que exagerar mientras sujetamos nuestra cabeza con las manos, por la parte de la nuca. Y, simultáneamente doblamos el tronco de un lado a otro.
A secuencia perfecta son de ocho a diez repeticiones de cada lado para trabajar abdominales y la zona baja de la espalda.