Comer muchas frutas y verduras con altos niveles de flavonoides podría ayudar a combatir el aumento de peso a medida que se envejece. Así lo establece un estudio de la Harvard T.H. Chan School of Public Health del estado de Boston (EE.UU). Y es que, los científicos que han participado en la investigación consideran que estas moléculas poseen propiedades antioxidantes y antiinflamatorios.
Como explica Mónica Bertoia, la principal autora del estudio, “algunas frutas como las manzanas, peras, fresas, bayas, pimientos y uvas se vinculan con un menor aumento de peso”.
Para examinar la relación entre los flavonoides y el peso, este equipo de investigación estudió siete tipos de flavonoides consumidos por 124.000 personas, de las que quedaron excluidas aquellas que padecieran enfermedades crónicas u obesidad. Así, los participantes fueron informando de su peso cada dos años y completaron cuestionarios dietéticos cada cuatro, entre 1986 y 2011.
Los resultados revelaron que el aumento del consumo de las subclases de flavonoides se asoció con un menor aumento de peso. La mayor relación se detectó con antocianinas, flavonoides, polímeros y flavonoles: cada mayor desviación estándar de la ingesta diaria se asoció con 0,07 a 0,10 gramos menos de peso ganado durante intervalos de cuatro años.
De todas formas, al tratarse de un estudio observacional, estas conclusiones no son definitivas. Bertoia considera que, aún así, con este estudio podrán perfeccionar las directrices dietéticasen la prevención de la obesidad.
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"Las peras, fresas, bayas, pimientos y uvas se vinculan con un menor aumento de peso"
Como explica Mónica Bertoia, la principal autora del estudio, “algunas frutas como las manzanas, peras, fresas, bayas, pimientos y uvas se vinculan con un menor aumento de peso”.
Para examinar la relación entre los flavonoides y el peso, este equipo de investigación estudió siete tipos de flavonoides consumidos por 124.000 personas, de las que quedaron excluidas aquellas que padecieran enfermedades crónicas u obesidad. Así, los participantes fueron informando de su peso cada dos años y completaron cuestionarios dietéticos cada cuatro, entre 1986 y 2011.
Los resultados revelaron que el aumento del consumo de las subclases de flavonoides se asoció con un menor aumento de peso. La mayor relación se detectó con antocianinas, flavonoides, polímeros y flavonoles: cada mayor desviación estándar de la ingesta diaria se asoció con 0,07 a 0,10 gramos menos de peso ganado durante intervalos de cuatro años.
De todas formas, al tratarse de un estudio observacional, estas conclusiones no son definitivas. Bertoia considera que, aún así, con este estudio podrán perfeccionar las directrices dietéticasen la prevención de la obesidad.
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