El 14 de septiembre se celebra el Día Mundial de la Dermatitis Atópica, una enfermedad crónica de la piel por la que se desarrollan erupciones cutáneas y picazón a causa de una reacción alérgica por contacto o por el consumo de alguna sustancia. Esta no es una patología contagiosa, pero sí que afecta a un elevado porcentaje de personas: entre el 15% y el 20% de los niños sufre dermatitis atópica, y cerca del 5% - 7% de la población adulta también la padece.
Algunos niños consiguen superar este problema cutáneo al entrar en la edad adulta, pero generalmente, una vez que se desarrolla esta enfermedad, se sufrirá durante el resto de la vida. Así pues, el cuidado de la piel será fundamental en estos pacientes para mejorar su calidad de vida, pues el picor en la dermis es la principal molestia a la que se enfrentan estos pacientes. Actualmente, existen terapias para tratar el dolor como, por ejemplo, la fototerapia, pero las lesiones no terminan de desaparecer, así que vamos a indagar en los trucos que existen para tratar de combatirlo.
TRUCOS PARA COMBATIR EL PICOR
Aunque rascarnos la piel nos pueda dar una sensación de alivio muy puntual, no es lo más recomendable en pacientes con pieles atópicas, ya que entraremos en un círculo vicioso que generará más picor y, por consiguiente, más ganas de rascar. Así que en nuestro objetivo de ‘no rascar’, debemos seguir los siguientes consejos:
- Productos emolientes: el picor es sinónimo de una inflamación de la piel, por lo que identificar su cuadro más primitivo nos permitirá anticiparnos a la aparición de eccemas y erupciones cutáneas. En este punto, bien se puede comenzar el tratamiento prescrito por el médico o utilizar cremas emolientes específicas para tratar pieles secas y con acción antiprurítica.
- Rutina de cuidado diario: no deberíamos esperar a que nuestra piel muestre señales de picor y comenzar a rascar para comenzar con una rutina de cuidados que alivie nuestra piel. Para ello, no olvides limpiar tu piel a diario con agua tibia y poca cantidad de jabón, formulado para pieles atópicas. Utiliza crema hidratante todos los días para aportar humedad a la piel y apuesta por ropa que resulte poco agresiva, como pueden ser la seda o el algodón, evitando textiles como la lana. Asimismo, debes protegerte si usas productos químicos, como detergentes y suavizantes a la hora de poner lavadoras, o productos de limpieza con alta capacidad irritante para la piel.
El efecto del frío ayuda a controlar la inflamación de la piel
- Objetivo ‘no rascarse’: el picor es la señal que nos dicta nuestro cuerpo para saber que hay algún elemento externo al que está reaccionando y en él interfiere nuestro sistema nervioso. Dado que el hecho de rascarnos irrita la piel y empeora el brote, lo ideal es engañar a nuestra mente con medidas alternativas y que también pueden aliviarnos. Un ejemplo es la opción de frotarnos la piel, pudiendo ayudarnos de pomadas, para incidir en la zona sin la necesidad de arañarnos y generar lesiones.
- Uso del frío: la aplicación de agua fría o de compresas húmedas conseguirá aliviar tu piel de forma casi inmediata, ya que actúa calmando la inflamación. Pero recuerda que no debes abusar de la temperatura, ya que un efecto muy frío también puede causarnos quemaduras. Si es la ropa la que nos provoca el picor, podemos optar por utilizar prendas húmedas cuando estamos por casa, como los pijamas a medio secar para mejorar las molestias nocturnas.
- Días de playa: ya casi todos conocemos las múltiples propiedades que tiene el agua del mar, pues su elevado contenido en sal funciona como bactericida y exfoliante, aunque el primer pensamiento que nos venga a la mente es que “el agua del mar hace que nos pique el cuerpo”. Contra todo pronóstico, el sol también ejerce un efecto calmante sobre la piel inflamada, así que las pieles atópicas pueden pasar unos minutos bajo los rayos solares, protegiéndose siempre y realizando exposiciones cortas y de forma controlada. Además, la disminución en los niveles de estrés en estos días vacacionales ayuda a calmar los brotes de picor y harán que nos sintamos mucho mejor.