La menopausia es esa etapa de la vida de toda mujer que siempre se quiere evitar. En España, la edad promedio de la menopausia se sitúa alrededor de los 51 años. La menopausia precoz, aunque es poco frecuente, se da antes de los 40 años. También se pueden dar casos de mujeres con 54-56 años que siguen teniendo sus reglas regulares, pero más allá de esa edad no es lo habitual.
Las mujeres en esta fase pueden experimentar retrasos en la regla, irritabilidad, síndrome premenopáusico más acusado o, por el contrario, hemorragias importantes hasta el punto de producir anemia. El sueño puede comenzar a alterarse y pueden experimentar algún sofoco o cefalea.
Según Mireia Roca, cofundadora de Domma, la compañía referente en bienestar y salud de la mujer madura, “en la menopausia se producen cambios en nuestro metabolismo que hacen que aumente nuestro índice de grasa corporal y una distribución de esta en el cuerpo. Si antes se distribuía en los muslos o en las caderas, en la menopausia es más frecuente que se acumule en la zona del abdomen”.
El 63,5% de las mujeres en esta etapa tienen problemas para conciliar o mantener el sueño
Además, un reciente estudio de Domma ha revelado que el 63,5% de las mujeres en esta etapa tienen problemas para conciliar o mantener el sueño durante toda la noche, y un 57,9% de las mismas afirma que padece sudores nocturnos que dificultan su descanso.
DEPORTES QUE PRACTICAR EN LA MENOPAUSIA
Una combinación del ejercicio cardiovascular y de fuerza es ideal para mantener un cuerpo sano. No es necesario establecer rutinas duras de HIIT (ejercicio de alta intensidad) o pasar horas haciendo máquinas en el gimnasio, pero sí es importante que cada día se le dedique un tiempo al deporte. Desde Domma aconsejan:
Salir a andar: el ejercicio cardiovascular ayuda a quemar calorías y previene la osteoporosis. Se recomienda andar por lo menos 30 minutos diarios e ir aumentando gradualmente el tiempo.
Nadar o realizar ejercicio en el agua: contribuye a corregir y mejorar la postura y la salud respiratoria y articular. Está especialmente recomendado para personas que padecen de osteoporosis, ya que el agua reduce el impacto en comparación con cualquier ejercicio que se haga sobre suelo.
Ejercicios de fuerza: ayuda a generar masa muscular, cuidando la salud de los huesos. Puede realizarse en casa o en el gimnasio, y es importante escoger un peso adecuado para la persona y luego ir aumentándolo poco a poco, ya que sobrecargarse puede provocar lesiones.
Saltar, bailar, gimnasia: los ejercicios de resistencia cardiovascular hacen que la sangre se mueva más rápido fortaleciendo al corazón.
Estiramientos: son importantes para evitar el agarrotamiento de los músculos. Es muy recomendable estirar o movilizar el cuerpo al levantarnos, así como antes y después del entrenamiento.