Cada vez es más fácil ser mujer. Atrás quedó esa época en la que la menstruación daba verdaderos quebraderos de cabeza en lo que a higiene íntima se refiere. Compresas que no absorben lo suficiente, tampones que hay que cambiar cada poco tiempo y alguna que otra sorpresa de última hora en las sábanas o en el pantalón blanco de las más valientes. Y es que, estar cómoda y segura, es lo que más importa.
La llegada de la copa menstrual a la vida de las mujeres ha supuesto una auténtica revolución. Quienes la desconocen, la temen. Pero quienes la han probado, no vuelven atrás. Numerosos profesionales de la ginecología avalan su eficacia, considerándolo un instrumento óptimo para cuidar el bienestar íntimo femenino en esos (ya no) tan temidos días del mes.
Además, supone un gran avance en cuanto a sostenibilidad, puesto que está creada de un material hipoalergénico y reutilizable que ayuda a evitar la producción innecesaria de residuos.
La llegada de la copa menstrual a la vida de las mujeres ha supuesto una auténtica revolución
Pero, ¿cuáles son los pasos que hay que seguir para usar correctamente la copa menstrual? Desde Chilly nos lo cuentan. ¡Apunta!
1. Esteriliza la copa. En primer lugar, es necesario esterilizar la copa menstrual en agua hirviendo, durante cinco minutos, cada vez que vayamos a utilizarla. Así aseguramos que esté completamente libre de organismos que puedan dañar la flora vaginal.
2. Introducirla. Pliega la copa menstrual sobre sí misma. Para hacer esto, aplana la copa y luego dóblala por la mitad para que la boquilla haga una forma de ''C''. Hay varias maneras de doblar la copa, elegir la más adecuada para cada mujer depende de ella. La parte doblada debe mirar hacia el interior de la mano.
3. Asegurarla. Con el fin de evitar fugas, asegúrate de que la copa se haya abierto correctamente, girando la copa después de la inserción. Al hacerlo ayudas a evitar derrames porque garantizas que la copa se ha abierto completamente.
4. Retirarla. Como si de un tampón se tratase, tira de del extremo que sobresale de forma delicada para evitar que se derrame. Limpiarla con agua templada y guardarla.
5. Limpieza. Para acompañar este proceso y evitar el contacto de gérmenes, lo más importante es tener las manos limpias y asear una vez al día tu zona íntima con un gel específico como el de Chilly. Si durante los días que tienes la regla sientes tu zona íntima más sensible, usa un producto enriquecido con elementos calmantes como Chilly delicado. Su fórmula suave con aloe vera y la hamamelis aporta una placentera sensación de alivio. Ideal para mucosas sensibles y perfecto para limpiar la zona íntima después de haber llevado la copa menstrual durante todo el día.